El Ayuntamiento de El Campello se ha comprometido a delimitar con una valla de madera, igual que la que se puede apreciar en la fotografía, la playa para perros situada en la Punta del riu Sec. Esta medida llega tras las quejas de los vecinos que han pasado de tener una cala con un certificado de calidad a un lugar de baño exclusivo para perros, sin acotar para evitar que salgan de este espacio y sin un sistema especial de limpieza para eliminar los restos de excrementos y orina de los animales. Es el primer verano de esta ordenanza, que ya ha generado un auténtico conflicto entre los vecinos y el resto de usuarios que acuden con sus mascotas.

La discusión se centra en la higiene, ya que hasta ahora esta playa no recibía una limpieza especial. Pasadas más de dos semanas desde que se inauguró, el Ayuntamiento anunció ayer que va a reforzar la limpieza, aunque la concejala de Turismo, Lorena Baeza, insiste en que el Instituto de Ecología Litoral concluyó que no existía peligro para la salud de las personas y que el agua sigue siendo apta para el baño. Sobre la suciedad en la parte de las rocas, Baeza asegura que con el caudal que arrastra el río Seco en los días de lluvia sería suficiente para terminar de limpiar los restos.

En la cala se instalará también un dispensador con bolsitas para los excrementos de los perros y una nueva señalización.

"Las personas que acudan con sus mascotas saben que tienen que recoger los deshechos igual que se hace en la calle y si no cumplen la ordenanza serán multados. Para asegurarnos vamos a intensificar la seguridad con más presencia de la Policía Local", confirma el alcalde. Juan José Berenguer apela al civismo para hacer viable esta playa.

"Los usuarios deben cumplir la ordenanza y mantener la limpieza y los vecinos tienen que respetar el uso que se le ha dado a la cala. Esta norma se tendrá que perfilar, es algo adecuado, aunque si al final vemos que no funciona se puede modificar", indica el edil.

Gandia obliga a atar a los canes en la playa

Gandia estrenó su playa para perros apenas unos días antes que la de El Campello. Son las dos primeras localidades que han puesto en marcha este servicio en toda la Comunidad Valenciana. En el caso de Gandia, se facilita a las personas que acudan con perros los utensilios necesarios para poder colocar una estaca de madera con un gancho para que todas las mascotas estén atadas. Además, las razas peligrosas deben llevar bozal. También se entregan bolsas higiénicas para poder recoger sus deposiciones y se ha instaurado un servicio especial de limpieza diaria con una serie de elementos químicos biodegradables para la higiene de la arena.

En el caso valenciano, la zona para mascotas está situada en un área casi virgen que apenas tiene vecinos. Es el modelo en el que se fijan los residentes en las cinco urbanizaciones afectadas en El Campello, que aseguran que el pasado domingo llegaron a contabilizar más de 40 perros sueltos en la Punta del riu Sec. La iniciativa es mejorable aunque exitosa ya que, según los vecinos, viene gente de toda la provincia e incluso de Albacete y Murcia.