Y la empresa cumplió su amenaza. La mercantil que gestiona el aparcamiento de Els Furs, en la playa del Carrerlamar de El Campello, ha cerrado al público sus instalaciones. La concesionaria presentó hace un mes un escrito ante el Ayuntamiento en el que comunicaba la renuncia unilateral al contrato de concesión por la falta de rentabilidad a partir del 31 de diciembre.

Y ahora ha pasado de las palabras a los hechos. Así, Estacionaments Urbans d'El Campello ha colocado vallas en los accesos de los vehículos al parking y ha precintado las escaleras por las que los clientes entraban y salían. Además, ha colocado carteles en los que deja clara su posición:"Este parking cierra temporalmente al público el día 30-12-2012 a las 24 horas hasta que el Ayuntamiento de El Campello continúe con la explotación".

La mercantil, como ya informó este diario, justificó en parte su decisión de renunciar a la concesión en que hay otro aparcamiento que le hace competencia en una zona próxima, aunque el Ayuntamiento sostiene que está situado a más de un kilómetro del de Els Furs y solo ha permanecido abierto en los meses de verano.

Estacionaments Urbans d'El Campello no solo ha cerrado el complejo, sino que exige al Consistorio casi 12 millones de euros en concepto de compensación económica.

El Ayuntamiento adjudicó en el año 2007 a la empresa la adjudicación de la concesión para la construcción y explotación del parking, situado entre la avenida Els Furs y la calle San Bartolomé. El presupuesto del proyecto ascendió a 15 millones de euros, aportados por la mercantil, e incluyó la remodelación del vial San Bartolomé.

Ahora, se basa en la infrautilización del servicio para proceder al cierre de las instalaciones y para solicitar al Ayuntamiento el "inmediato pago" de los 11,8 millones, como consta en el escrito remitido.

Por su parte, el alcalde, Juanjo Berenguer, aseguró que el Ayuntamiento "quiere que se cumpla el contrato, es decir, que la empresa tiene que dar el servicio".

Preguntado por la posibilidad de que el Consistorio sancione a la empresa o decida resolver el contrato por incumplimiento, con la correspondiente indemnización, Berenguer explicó que se trata de un tema técnico y jurídico "y serán los técnicos los que den las pautas en este sentido".

El último pleno de El Campello, celebrado el 20 de diciembre, ya rechazó por unanimidad de los grupos políticos las pretensiones de la empresa y le exigió el cumplimiento de sus obligaciones.