El PP cierra filas en Sant Joan d'Alacant. El presidente local, José López Garrido, ha decidido no continuar en el cargo, lo que allana el camino a que sea el alcalde, Manuel Aracil, quien ocupe ese puesto, según informaron ayer fuentes del partido.

"No me planteo seguir como presidente, creo que hay que dar paso a otra gente que acompañe y apoye al equipo de gobierno en estos momentos", explicó López Garrido. El exedil ha puesto el cargo a disposición del partido y a partir de ahora "hay que contar con la opinión del alcalde".

López Garrido admitió que, como diputado en el Congreso, está más centrado en su actividad parlamentaria que en el día a día en el PP santjoaner, por lo que considera lógico dar un paso al lado: "Estoy a disposición del partido para lo que quieran, siempre he abogado por la unidad y ahora sigo en la misma línea, creo que hay que llegar a una opción de consenso y no será difícil".

Por su parte, el primer edil sigue con la línea que marcó nada más acceder a la Alcaldía: mutismo total en cualquier tema. No obstante, fuentes del partido dejaron claro que él tiene todo el poder de decisión y que previsiblemente será quien ocupe el puesto de López Garrido.

"No hemos tratado ese tema todavía, no hemos hecho ninguna reunión y no hay un calendario de actuaciones, cuando llegue el momento se decidirá", afirmó Aracil, a quien no hay quien le replique en el partido desde que ganó las elecciones por mayoría absoluta y desbancó a los socialistas tras tres legislaturas y media en el poder.

Se cierra así una etapa de turbulencias que arrancó meses antes de las elecciones municipales de mayo del año pasado con la lucha interna entre campistas y ripollistas por hacerse con las riendas del partido, elegir alcaldable y confeccionar la lista de ediles.

Discrepancias

López Garrido es el máximo dirigente del partido en el municipio desde hace siete años, pero a la hora de elaborar la candidatura surgieron discrepancias entre campistas y ripollistas. Fruto de esa guerra interna, más de uno salió trasquilado, ya que Aracil acabó imponiendo su lista y limpió todo rastro de ripollismo. De hecho, solo dos ediles continúan respecto a la anterior legislatura: Carolina Sala y Santi Román.

López Garrido, eso sí, supo jugar bien sus cartas y, tras aceptar sin apenas oponer resistencia el nombramiento de Aracil como cabeza de lista, solo tuvo que esperar unos meses para que el partido le buscara un puesto acorde con su experiencia: diputado en el Congreso, donde ocupa un puesto relevante: secretario en la comisión de Economía.

De hecho, este verano estuvo en primera fila en las comparecencias, sobre reestructuración bancaria y saneamiento financiero, del exgobernador del Banco de España Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el expresidente de Bankia, Rodrigo Rato, o la exministra Elena Salgado.