El Centro de Día para personas dependientes, cuya obra fue inaugurada en marzo de 2011 tras una inversión de 1,3 millones de euros, continúa cerrado. Las instalaciones, de propiedad municipal que fueron adjudicadas a una empresa privada para su gestión, están listas desde hace meses y sólo falta, según confirmó ayer el alcalde, Sebastián Cañadas, el visto bueno de la Generalitat al centro que está destinado únicamente a dar servicio a personas con discapacidad y que sean dependientes.

El perfil del centro fue el punto de discusión que en parte retrasó la tramitación de la autorización necesaria por parte del Consell. Así, una vez se realizó el traspaso de poderes del PSOE al PP, en mayo de 2011, el equipo de gobierno de Cañadas decidió revisar el contrato con la empresa adjudicataria ya que consideraba que no se especificaba el uso que finalmente se daría al centro. Unas dudas sobre el proyecto que negó rotundamente el portavoz del grupo municipal socialista, Antonio García Teruel, quien señaló ayer que en el pliego de condiciones se determina perfectamente que el Centro de Día se destinaría a personas con discapacidad con dependencia de sus familias.

Cañadas afirmó ayer que la tramitación en Conselleria está en curso aunque no pudo precisar la fecha en que las instalaciones comenzarán a funcionar. Asimismo, el primer edil señaló que la empresa adjudicataria -con quien intentó contactar sin éxito este periódico- se encarga actualmente del mantenimiento del antiguo caserón que fue restaurada para acoger el centro y que se encuentra publicitando las plazas que ofrecerá, según Cañadas, próximamente.

Rehabilitación

El anterior gobierno socialista destinó 1.300.000 euros a la rehabilitación del antiguo caserón Sant Pere, ubicado en plena huerta de Mutxamel, en el barrio del Raval, con fondos del Plan E. La gestión privada de este centro se adjudicó en marzo de 2011 y el contrato con la empresa se consolidó en el mes de julio del mismo año.

"Hemos preguntado por el estado de la tramitación de este centro en muchas ocasiones y nos responden que se está trabajando en ello", afirmó el portavoz socialista, quien subrayó que "lo más grave no es la inversión que se ha hecho y que lleva un año sin ningún tipo de rentabilidad, sino la situación que atraviesan esas 60 familias, que disponen de un servicio que no pueden utilizar".

García Teruel recordó ayer que el Centro de Día Sant Pere para personas dependientes física y psíquicamente es el único que existe en la comarca.El Centro de Día fue proyectado en su momento por la creciente demanda en el municipio de familias que tenían a su cargo personas con discapacidad física o mental y que necesitaban una asistencia especial. Familias que se han visto doblemente perjudicadas tanto por el retraso en la apertura del centro como por la demora en las ayudas de la Ley de Dependencia que sufren los ciudadanos de toda la Comunidad.