El Punto de Encuentro Familiar se ha trasladado desde Ancha de Castelar a un local anexo a las viviendas tuteladas de la calle Petrer, donde tiene abiertos 90 expedientes familiares de toda la comarca. Hasta ahora la Fundación de Ayuda a las Víctimas del Delito -Favide- prestaba este servicio que en adelante gestionará Cruz Roja.

Los Puntos de Encuentro son espacios neutrales donde abogados y trabajadores sociales permiten el cumplimiento del régimen de visitas que establecen los jueces a los hijos de parejas en situación de crisis o ruptura. Estos recursos hasta ahora eran competencia de la Secretaría Autonómica de Justicia, de la que depende Favide. Con el cambio de modelo, los ayuntamientos deben habilitar un local, cederlo y encargarse de su mantenimiento.

Durante una visita a las nuevas instalaciones, la directora general de Familia y Mujer, Celia Ortega, explicó que antes de final de mes comenzará a gestionarlo Cruz Roja Española, en lugar de Favide. Según indicó, este cambio "responde a criterios de actuación a la nueva estructura del Consell

La concejal de Bienestar Social, María Ángeles Genovés, recordó ayer que en San Vicente funciona desde 2006 mediante un convenio que mantiene la Conselleria de Justicia y Bienestar Social con el Ayuntamiento. La nueva sede, cuya cesión se va a firmar aunque ya está en uso, es "un local totalmente accesible, moderno y en el que se garantiza la privacidad de los menores", según explicó ayer la concejal. Genovés recordó que en estos puntos "se programa la comunicación de los hijos con sus padres en los casos conflictivos y se facilita el cumplimiento de los regímenes de visitas, favoreciendo así el derecho fundamental del menor a mantener una relación con ambos progenitores necesaria para su buen desarrollo físico, afectivo y emocional".

Un 34,47% de casos con orden de protección

El 88,7% de los casos atendidos en los 16 Puntos de Encuentro Familiar gestionados por Favide en 2011 son familias en las que la custodia de los niños recae en la madre. En el 34,47% media una Orden de protección por violencia de género. En un año se atendieron 902 expedientes y 1.033 menores mantuvieron relación con alguno de sus progenitores mediante este servicio, según los datos del Consell.

Más del 52% de los menores atendidos tenían entre 4 y 8 años de edad y cerca del 15% era menor de cuatro.

En el 54% de los casos se intercambiaba el niño, el 38% fueron visitas tuteladas con supervisión y el 8% sin supervisión.