Los beneficiarios del programa piloto "Seniority", de teleasistencia a mayores a través de teléfonos móviles, ha pasado a ser de pago. Las personas que tenían terminales destinadas a facilitar su autonomía personal y localización tendrán que abonar entre 23 y 30 euros en adelante si quieren continuar usándolo. La medida ha sido duramente criticada por el grupo municipal del PSOE, que acusó ayer a la alcaldesa, Luisa Pastor, de empezar a recortar por "los servicios básicos y sociales", mientras desde el equipo de Gobierno indicaron que los beneficiarios ya sabían que sólo era gratuito 18 meses.
El proyecto se denomina "Seniority para todos".
"Una treintena de personas mayores se beneficiaban de este servicio, que tenía como objetivo aumentar la autonomía personal de este colectivo, así como mejorar la capacidad de comunicación a través de teléfonos simplificados para que puedan permanecer en contacto directo con sus familiares o cuidadores", explicó ayer el portavoz socialista.
Devolverlo
Selva denunció que "el PP no haya esperado ni tres meses desde las elecciones municipales" para requerir el dinero. El edil aseguró también que "los usuarios nos han trasladado su decepción por la obligatoriedad de realizar el pago para mantener el servicio ya que gracias a estos dispositivos móviles han conseguido un mayor grado de tranquilidad en sus vidas y, sobre todo, mayor movilidad ya que el riesgo de sufrir un percance puede ser siempre vigilado por un familiar cercano". Ahora, agregó el concejal del PSOE, "muchos de ellos se verán en la obligación de devolver el terminal".
También indicó que en vez de limitar el servicio se tendría que haber extendido. "Es increíble que la única justificación que se haya dado sea la falta de presupuesto en un Ayuntamiento donde el despilfarro y el gasto en ostentación es una inmoralidad". agregó Rufino Selva.
Mientras, desde el equipo de Gobierno local explicaron que, cuando se entregaron las terminales, los usuarios firmaron un contrato por 18 meses y "ya sabían que a partir de entonces había que pagar". El programa empezó a principios de 2009 y los últimos treinta terminales se entregaron en marzo del pasado año.
Contrato con la empresa
También destacaron que era un proyecto piloto que se puso en marcha "para ver como funcionaba" y que era un "servicio avanzado que requiere ciertos conocimientos de manejo del móvil". En agosto "expiró el plazo y, si quieren continuar, tienen que suscribir un contrato con la empresa ya que el servicio se seguirá prestando al margen de la Generalitat".
En todo caso, apuntaron que sí se mantiene el otro servicio de teleasistencia, con más usuarios, que presta la Concejalía de Servicios Sociales en colaboración con la Diputación.
