La Policía Local de El Campello ya ha iniciado los controles que el pleno municipal aprobó el pasado uno de septiembre para verificar la procedencia de las basuras que entran en el vertedero de Les Canyades. Del mismo modo los vecinos de la zona norte volvieron el pasado sábado por la noche a sufrir fuertes hedores procedentes de la planta de basuras, según confirmaron ayer vecinos, PSOE y el propio primer edil Juanjo Berenguer.
El alcalde explicó ayer que los controles se pusieron en marcha prácticamente al día siguiente de aprobarse la medida propuesta por la oposición y a la que se sumó el equipo de gobierno popular. Estas inspecciones de la Policía son aleatorias y por sorpresa para asegurarse de que no lleguen a Les Canyades basuras de fuera de la Zona XV, que abarca las Marinas y El Campello, y verificar que los vehículos no presentan ninguna irregularidad. Se elaborará un informe mensual al respecto.
Del mismo modo el pasado sábado los residentes de la zona norte volvieron a padecer fuertes malos olores, personándose en la zona la Policía Local, la Guardia Civil y dos ediles del PSOE Pepe Varó y María Jiménez. Ésta última explicó que el hedor era insoportable y los socialistas volvieron a exigir soluciones a Ayuntamiento y Consell.
Vecinos de la zona señalaron que los malos olores son constantes todas las noches y ayer se reunieron con el alcalde para trasladarle una vez más la situación que viven. El primer edil explicó a este medio que el concejal de Medio Ambiente pidió ayer a primera hora un informe a la planta sobre este episodio de malos olores y que están a la espera de esa información.
Además, el cierre de la planta de Calp va a llevar a que sus basuras sean trasladadas a El Campello, que por otra parte es la planta donde debería llevarlas al estar dentro de la Zona XV.
