San Vicente se crece ante la adversidad. Al menos sus festeros han intentado que así sea durante la Entrada Cristiana celebrada ayer en el centro urbano de la localidad. Frente al descenso del número de festeros en sus filas, a causa de la crisis, los integrantes de las comparsas quisieron demostrar su fortaleza y su amor a la fiesta protagonizando una apasionada Entrada.

Pasadas las seis de la tarde aparecía la Comisión de Fiestas, encargada como cada año de abrir el desfile con sus típicas sanvicenteras y las dos carrozas reales. Las niñas y jóvenes que encabezaban la marcha repartían bolsitas de frutos secos entre el público, un acto que se ha convertido en marchamo de esta institución festera en el desfile. Un cuerpo de bailarinas aparecía después interpretando una coreografía medieval mientras otro grupo emulaba el estilo de las cortes dieciochescas; pero fue una dama gigantesca la que anunció la llegada de la Reina de la Primavera. A bordo de una carroza de cuento de hadas, encabezada por dos blancos corceles, aparecía Paula Berenguer Escolano, acompañada de José María Alcaraz y su corte de honor, Ana María Devis García, Candela Pastor Cremades y Claudia Dénia Gregori. Iba escoltada por un cuerpo de danza donde las integrantes representaban el proceso de floración primaveral.

Llegaba el turno de la Reina de las Fiestas, Ana María Villar Marhuenda, quien hizo su aparición estelar portando con orgullo la vara de mando del Consistorio. La flamante Alcaldesa de Fiestas estuvo acompañada, al igual que en su proclamación, por Marta Lillo Ruiz, Desireé Beltrán Sánchez, Marina Varó Chust y Carmen Vargas Torregrosa. Ambas carrozas portaban sus respectivos pajes , cargo que este año recaía sobre José Manuel Alcaraz Campello, Ángeles Aznar Blanco, Pablo Molina Cantó, Saul Serrano Torregrosa y Paloma Pastor Cremades.

Al cierre del séquito real le siguió la puesta en acción de la Capitanía Cristiana, que este año recaía sobre la comparsa Contrabandistas. Sin duda la Entrada destacó por su impronta española, donde redundaron los volantes y los populares pasodobles.

Miles de personas respaldaron el esfuerzo de los comparsistas por ofrecer una puesta en escena espectacular con aplausos y carteles con mensajes personalizados.

La mayoría de los miembros de la Corporación municipal observaba desde el palco presidencial el desfile. La alcaldesa Luisa Pastor, la concejal de Fiestas, Francisca Asensi, el candidato socialista Rufino Selva, la consellera de Bienestar Social, Angelica Such, la secretaria autonómica de Medio Ambiente, Mari Ángeles Ureña, el director general de Obras Públicas, Ismael Ferrer o el director general del Ente Gestor de la Red de Transporte y Puertos de la Generalitat (GTP), Antonio Carbonell, fueron algunos de los presentes. También les acompañaban miembros de las capitanías 2010 y las reinas de la Casa de Andalucía, entre otros.

Agolpados en las calles Alicante y Ancha de Castelar los vecinos disfrutaron de las escuadras Jasminer, la pasión del cabo Francisco Alfaro Galiana, las filadas infantiles de Vivillos y Tempranillos y la colla Floreal. El ballet de Mari Carmen Sereno precedía a la carroza de La Vid, donde las vendimiadoras recordaban el tradicional arte vinícola, a las cigarreras con su fábrica de tabaco o a la manta contrabandista. Las filadas de la Capitanía 2011 fueron las "Caireñas", "Tragabuches", "Trianeras", la filada Ecuestre, las "Niñas de Écija", "Pernales", "Rondeñas" y "Pasos largos". Uno de los más aclamados de la tarde fue el ballet de Virginia Bolufer, aunque los grandes protagonistas eran el Capitán General, Luis Hevia Agilar, y la Abanderada General, Maite Monllor Pastor, que sorprendieron a los presentes apareciendo sobre una carroza que enjaulaba auténticos lobos, uno de los temas que protagonizó la Entrada, junto con percherones, perros de caza, burros, caballos y otros animales.

A la comparsa Contrabandistas les siguieron los Almogavers, Maseros, Nómadas, Estudiantes, Visigodos, Astures, Cristians y Cabellos Templarios; mientras que la alferecía cristiana, capitaneada por Vicente Sogorb Cañizares y Joaquina García Segura, cerró la Entrada en San Vicente con un boato muy emotivo y lleno de colorido.