El municipio de Sant Joan vive hoy el pleno municipal más importante y polémico de los últimos cuatro años. En el orden del día figura, entre otros diez asuntos, la aprobación provisional del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) un proyecto que para el alcalde, Edmundo Seva, "ordena el territorio como quiere el pueblo con un crecimiento secuencial", y que para los grupos políticos en la oposición, asociaciones vecinales y muchos particulares -que así lo han hecho constar en las 1.640 alegaciones que ha recogido este plan en sus tres exposiciones públicas- agota el suelo disponible y supone la carta de defunción del municipio.
La futura urbanización de 2,7 millones de metros cuadrados de huerta en la partida Fabraquer Nord con la construcción de 5.000 viviendas y las afecciones por la ampliación de la A-7 han sido los asuntos que más críticas han despertado en todos los ámbitos. Aunque la aprobación de hoy es provisional, el grupo socialista cuenta con mayoría absoluta, tendrá que ser la Conselleria de Urbanismo la que respalde definitivamente una ordenación que lleva tramitándose ocho años.
Edmundo Seva dijo ayer que confía en que el Consell apoye la ordenación de Sant Joan. "Esperamos de la cordura de la Generalitat porque hemos ido de su mano. Yo he realizado más de 15 viajes a Valencia llevando el PGOU en porciones", dijo Seva quien se mostró satisfecho "por la forma en la que se ha llevado la tramitación del Plan, ya que pocos municipios han tenido las dificultades de tropezar con la Ley Reguladora de la Actividad Urbanística (LRAU) y con la Ley Urbanística Valenciana (LUV) y porque pocos han tenido tres exposiciones públicas. Se ha querido dar el máximo de transparencia y fomentar la participación". Respecto al talón de aquiles en que se ha convertido la ordenación de Fabraquer, Seva destacó que el crecimiento será secuencial y "nuestro compromiso es que hasta que no esté desarrollando una zona no se ejecute otra. Que me digan donde está el pelotazo urbanístico".
Respecto a la reserva de suelo que plantea la oposición, el alcalde quiso recordar al PP que "no hace mucho la Generalitat ha aprobado una ley que permite construir en parcelas de 10.000 metros cuadrados. Cualquier persona podría venir, pedir licencia y tendríamos que dársela. Con el nuevo plan se ordena todo el territorio para el futuro y cuando Sant Joan crezca lo hará de forma ordenada y mirando al mar". Asimismo, Seva lamentó que el plan que hoy se aprueba no cuente con el consenso y el apoyo de todos los grupos políticos.
También ayer, el concejal y portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sant Joan, Paco Burillo, apuntó que confía y cree estar convencido de que la Conselleria de Urbanismo "no aprobará ni será cómplice" de lo que considera un "atraco". El PP votará en contra de la aprobación provisional del planeamiento urbano "porque pone fecha de caducidad a la muerte de Sant Joan". Criticó el "empecinamiento" del grupo municipal socialista en urbanizar Fabraquer en contra de las tesis del PP que propone la reserva de, al menos, un millón de metros cuadrados para necesidades futuras. "No lo entiendo si no es porque tienen compromisos y ataduras", dijo.
Respecto a las alegaciones, que hoy serán contestadas en el pleno y posteriormente por escrito, Seva dice que se ha hecho conforme marca la ley mientras el PP y el Bloc aseguran que el proceso es poco transparente.
Tampoco el horario de convocatoria del pleno de hoy, a las 8.30 horas de la mañana, se ha escapado a la polémica. Desde el martes, en que se supo la hora tanto el Bloc como el PP han criticado "las prisas" con las que se ha convocado la sesión plenaria y la hora porque, a su juicio, va a reducir la asistencia a un pleno tan importante. Según el alcalde, existe acta de la última comisión de Hacienda en la que desde la oposición se insistió en se convocara por la mañana.
