La romería a la ermita de Santa Ana de Salafranca, en Sant Joan, podrá ser finalmente posible este año después de que antiguos miembros de la Asociación Ermita Santa Ana y la Comisión de Fiestas de Salafranca hayan unido esfuerzos para evitar que se pierda la tradicional cena y posterior peregrinación que tendrá lugar durante el último fin de semana de julio.

Hace unos días, este diario se hizo eco de la disolución de la Asociación Ermita de Salafranca debido a motivos personales, económicos e institucionales, según explicaba el ex presidente Miguel Sellés. Los más de 3.000 euros que integraban el fondo económico de la asociación se donaron a partes iguales al Colegio San Rafael, el Centro Infanta Elena y la Asociación Española contra el Cáncer.

La sorpresa ha llegado esta misma semana con el acuerdo entre diversos miembros de la extinta asociación y la Comisión de Fiestas de Salafranca que no quieren que se pierda esta popular romería.

El edil de Fiestas, José Luis Olcina, recibió el pasado miércoles a una delegación de los representantes de las fiestas de Santa Ana compuesta por Isidro Espinós, Consuelo Ballestero, Maite Ausina y Gregorio Durá, para ultimar los detalles de las celebraciones de este año.

Olcina ha destacado que esta colaboración pone de manifiesto que "las fiestas y tradiciones no son patrimonio de personas sino de todo el pueblo". Por esta razón, el Ayuntamiento se ha comprometido a colaborar con la organización de las fiestas.

El día 31 de julio tendrá lugar el tradicional "Soparet de sobaquillo". La romería, que contará con la participación del grupo de baile "La Trena", se celebrará el 1 de agosto a partir de las ocho de la tarde desde la Iglesia hasta la Ermita de Santa Ana, finalizando con una misa cantada por el Orfeón de la Tercera Edad.

Los nuevos representantes han invitado a todos los vecinos de Sant Joan y visitantes a asistir a estas tradicionales fiestas.