"El proyecto del PGOU de Sant Joan es una trampa que el PSOE intenta tender a la Conselleria de Urbanismo y es falso que esté consensuado a nivel político". Así de tajante se mostró ayer el portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sant Joan, Paco Burillo, quien auguró que el Consell no aprobará una ordenación que "va en contra del modelo territorial que pretende y cuyo único objetivo es recalificar Fabraquer Sur para dar el pelotazo. De aprobarse, sentaría un precedente gravísimo".

Burillo respondió de esta manera al concejal de Urbanismo de Sant Joan, Pablo Celdrán, quien ayer, en estas mismas páginas, se mostraba convencido de que la versión previa de la ordenación urbanística que el pleno aprobará, de forma provisional, a final de mes va a tener el respaldo de la Generalitat porque, dijo, "ha sido consensuada".

Según Burillo, el PSOE lleva 10 o 12 años, desde que gobierna en el Ayuntamiento, intentando aprobar un plan general para "hacer frente a compromisos adquiridos con determinadas personas que compraron terrenos rústicos en Fabraquer a precios desorbitados". El PSOE, por el contrario, dice que Sant Joan no puede seguir de espaldas al mar y por eso el PGOU prevé en Fabraquer, para los próximos 20 años, unas 5.000 viviendas protegidas y un gran zona verde, el parque de la Huerta. Según Celdrán "el pueblo va a decidir lo que se hace en Fabraquer".

El PP tacha de "barbaridad" que se recalifique todo el suelo que queda en el municipio, unos 2.000.000m2 -Sant Joan sólo tiene 9 km2 de territorio- y entiende que se tendría que haber hecho una reserva de, al menos, un millón de metros para necesidades futuras. Además criticó que las tres exposiciones públicas del PGOU que ha recibido unas 1.500 alegaciones han sido un caos.