El alcalde de Madrid Alberto Ruiz-Gallardón visitó ayer Aigües para asistir al funeral de su tía abuela, Victoria Rojas Rosado, condesa de Casa Rojas, que falleció el pasado domingo en la capital y que ayer recibió sepultura en el cementerio aigüero. La fallecida era muy conocida en el municipio, ya que su familia ha sido propietaria de buena parte del término y actualmente era dueña de la pinada de Aigües y de la finca de La Torreta.

El alcalde de Madrid también es bien conocido desde pequeño en la localidad y ayer no paró de saludar y hablar con los lugareños y recordar tiempos pasados. Su tía abuela, hermanastra de su abuelo, falleció a los 89 años en Madrid, donde residía en los últimos años. Hacía tiempo que su delicado estado de salud le impedía visitar Aigües, población a la que ha estado muy ligada y donde ha pasado una parte importante de su vida, sobre todo en su niñez.

La homilía se celebró a las 16.00 horas en la Iglesia de Aigües, en una ceremonia íntima a la que asistieron unas 50 personas entre familiares y amigos. El párroco destacó durante el funeral que "Victorilla", como era conocida en Aigües, ha rezado mucho por su pueblo, al que quería mucho, y que su pueblo le ha correspondido por ello. Durante el funeral el propio Gallardón leyó varios pasajes desde el altar. Después, enterraron las cenizas de la condesa en el panteón familiar del cementerio, donde reposan los restos de los padres y un hermano de Gallardón. Antes, el dirigente popular, que llevaba muletas por una lesión en una pierna, comió un arroz con sus familiares en el restaurante Alejandro, frente a la iglesia.

La alcaldesa de Aigües, Pilar Sol, destacó ayer que el pueblo le debe mucho tanto a la condesa como a su padre, el conde de Casa Rojas, recordando los terrenos donados para diferentes actuaciones al Ayuntamiento, como la zona recreativa de la Pinada. Sol señaló que los Casa Rojas "han sido indispensables para el desarrollo de Aigües".

Entre los siglos XIX y XX la familia de la condesa fue una de las principales terratenientes de la provincia de Alicante. Su familia fue propietaria del balneario de Aigües y actualmente es dueña de la ermita, La Torreta y de la Pinada de Aigües, uno de los pulmones verdes de la provincia.

La alcaldesa afirma que se sentía como "una aigüera más"

La primer edil de Aigües, Pilar Sol, destacó la gran vinculación de Victoria con Aigües, y explicó que sus enfermeras le comentaron ayer que durante el último año no paraba de echar de menos el pueblo, ya que ella se consideraba "una aigüera más", al igual que Ana, la madre de Gallardón. Sol destacó que "Victorilla era muy entrañable, quería mucho al pueblo, ya que sobre todo su niñez y juventud la pasó aquí y convivió con la gente del pueblo. Su familia era muy abierta y acogedora y el pueblo la quería mucho".