El Ayuntamiento de Mutxamel ha logrado la suspensión cautelar de la subasta del Club de Campo que debía haberse celebrado ayer. El proceso, motivado por la deuda de 70.000 euros que mantiene esta sociedad con Suma por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), queda supeditado a la reunión que hoy mantendrán representantes municipales con la dirección del Club. La alcaldesa Asunción Llorens explicó ayer que el Consistorio ha hecho uso de la opción de pedir una prórroga, con el objetivo de llegar a un acuerdo sobre la liquidación de la deuda y aclarar la titularidad de la entidad. En la reunión estará presente la primera edil con técnicos municipales y Llorens explicó ayer que el proceso no se ha paralizado, sólo se ha ganado tiempo y no se puede demorar más allá de hoy, por lo que si no se lograra una solución en este encuentro, que será en el Ayuntamiento, la venta de 450 participaciones del Club de Campo de Alicante seguiría adelante.

Hay que recordar que el aplazamiento corresponde a la segunda convocatoria de subasta, ya que la pasada semana se celebró la primera, quedando desierta. Suma -ente tributario de la Diputación- ha embargado el mayor paquete accionarial de la sociedad, compuesto por 450 participaciones, en ejecución de la deuda contraída por la entidad con el Ayuntamiento, que asciende a 50.000 euros por el IBI, más 20.000 euros por intereses de demora y costas.

Tal y como ya informó este medio, la Asociación Club de Campo ha anunciado una demanda contra el Consistorio por valor de cuatro millones, ya que acusan a la Corporación de autorizar la subasta y no querer reconocer su titularidad.

Esta deuda por impago se remonta a 1992 y la entidad ya abonó el año pasado otros 50.000 euros que debía. Pese al acuerdo entre Ayuntamiento y Club para liquidar la deuda mediante la cesión del uso de las instalaciones, Suma ha iniciado este proceso, que cuenta con otro escollo, que es la titularidad de esas acciones, ya que aún no se ha reconocido que son propiedad de la Asociación Club de Campo pese a las medidas legales tomadas. Consta que las participaciones pertenecen a la mercantil Inmersa, que no existe a efectos legales desde 1992.

Fuentes del Club de Campo señalaron que desde el Ayuntamiento les comunicaron en la noche del martes la suspensión, pero que ayer tuvieron que acudir a Suma para que se pudiera confirmar por escrito que no se iba a celebrar la subasta, y explicaron que no entienden cómo se ha llegado a estos extremos, ya que en 2006 ya presentaron ante Suma una tercería de dominio en la que acreditaban su condición de legítimo propietario y su voluntad de pagar la deuda. Y también lamentaron que no haya sido hasta ahora, cuando ha llegado el tema a la prensa y han anunciado la demanda de cuatro millones contra el Ayuntamiento, cuando el Consistorio ha reaccionado.

Una zona deportiva cuyo valor podría rondar los 12 millones

Las instalaciones deportivas del Club de Campo están ubicadas en la zona limítrofe entre Mutxamel y Alicante, muy cerca de la zona de Las Paulinas a la que se accede por la ronda de Sant Joan y por la carretera del Hogar Provincial, en un enclave urbanístico privilegiado. Cuenta con piscina olímpica, 11 pistas de tenis, pista polideportiva, pistas de pádel, gimnasio, restaurante y zonas verdes. La entidad ha encargado una tasación del Club, que podría rondar los 12 millones, y de ahí que pida una indemnización de 4 millones por las 450 acciones, que representan la tercera parte del total, que son 1.200.