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l despliegue de efectivos de la Guardia Civil en la zona del Rodalet de San Vicente del Raspeig durante los últimos días ha resultado efectivo para frenar la venta de estupefacientes. La Benemérita mantendrá un dispositivo reforzado de vigilancia en la partida durante los próximos días para evitar un posible incremento del tráfico de drogas en la zona tras el desalojo de 65 viviendas del barrio del Carmen de Alicante. Así lo comunicaron los mandos policiales a la alcaldesa de San Vicente del Raspeig, Luisa Pastor en la reunión de la Junta de Seguridad Ciudadana que se celebró ayer en el Ayuntamiento.

A pesar del éxito de esta iniciativa, Pastor expresó su preocupación por el futuro de la zona cuando finalice esta medida de choque. Ante este escenario, la alcaldesa avanzó que está pendiente el desarrollo del plan parcial El Rodalet "que nos permitirá que esta zona cambie de aspecto y que no se produzcan nuevos asentamientos ilegales". El Ayuntamiento también está estudiando otra media para desarrollar un plan de actuación urbanística al detectar que una parte de las viviendas no tienen acreditada la titularidad por lo que de no aparecer podría pasar a manos municipales y así poder actuar sobre ellas. Pastor hizo un llamamiento a los vecinos para que denuncien cualquier situación que les parezca sospechosa.

La subdelegada del Gobierno en Alicante, Encarna Llinares, quien no asistió a la junta por "problemas de agenda" insistió en que la reunión no era de "extrema urgencia" al haberse adopta ya medidas "para evitar asentamientos de las personas desalojadas".

Por otro lado, efectivos de la Guardia Civil han realizado durante los dos últimos meses un operativo en San Vicente, en el que han sido detenidas dos personas y se han intervenido de 376,26 gramos de hachís, además de diversas cantidades de otras sustancias estupefacientes. En uno de estos controles fueron localizados, ocultos debajo del cambio de marcha del vehículo interceptado, 211 gramos de hachís y se detuvo a dos personas.