Sabemos que las contraseñas que consisten en fechas de cumpleaños o preguntas sobre nosotros mismos son fáciles de descifrar por los ciberdelincuentes, por no hablar de las más obvias, como la típica ´12345´.

Pero ¿qué sucede con los patrones de bloqueo que se han extendido en el caso de los teléfonos móviles? La firma de ciberseguridad Kaspersky Lab nos da algunos consejos.

Para averiguarlo, la investigadora Marte Løge, de la empresa noruega Itera Consulting, ha analizado los patrones creados por los usuarios para tres situaciones diferentes: apps de compras, pantalla de bloqueo del smartphone y banca electrónica. La primera conclusión fue que la gente protege con patrones mucho más complicados para las apps y la banca que para bloquear su terminal. Además, el 10 % de los encuestados se resistía a abandonar las contraseñas clásicas escritas.

Tampoco basta la extensión media de los patrones investigados, de solo cinco puntos. Con ellos se pueden crear 7.000 combinaciones. El 73 % de la gente parte de la esquina superior izquierda o de la inferior derecha para trazar el patrón.

Si de verdad quieres usar un patrón seguro:

1. Nunca uses en tus contraseñas combinaciones obvias como los patrones con letras o números. Usar patrones débiles, es prácticamente como no usar nada.

2. El mejor punto de partida es el que está en la mitad del lado derecho de la pantalla, ya que es el menos común. La esquina inferior derecha también es una buena opción.

3. Procura que tu patrón tenga al menos ocho o nueve puntos de extensión, para crear más combinaciones posibles? y menos usadas.

4. ¿Te has planteado volver a la contraseña clásica? En comparación con un patrón, es más fácil que una contraseña sea larga, segura y fácil de recordar a la vez.

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