La desviación de los ojos puede operarse a cualquier edad, pero existen una serie de condicionantes médicos y éticos que debemos tener en cuenta antes de tomar la decisión de intervenirnos de dicha desviación ocular o estrabismo.

Así, lo primero que debemos tener en consideración es que si bien la edad no es un problema para corregir la desviación de los ojos, donde sí representa un obstáculo es a la hora de recuperar el ojo vago, el cual va ligado en muchas ocasiones al estrabismo.

En los niños lo primero que debemos de tratar es el ojo vago o ambliopía mediante el empleo de parches, filtros, gafas, etc€. pues la edad sí supone en este caso un problema, pues cuanto más joven se es, más fácil es tratarlo y a partir de los 8-10 años de edad la dificultad para recuperarlo es mucho mayor, requiriendo a veces de técnicas especiales como ya en otras ocasiones hemos comentado.

Por lo tanto una vez recuperada la visión o alcanzado el máximo posible para su edad, es cuando deberemos plantear la intervención del estrabismo.

En los adultos el tema de recuperación visual ya es mucho más dificultoso y en la mayoría de ocasiones no es algo que nos interfiera con la intervención del estrabismo, si bien debemos considerar de forma especial aquellos pacientes que lo que desean es quitarse las gafas y además operar el estrabismo que tienen aún con ellas.

En estos casos lo correcto es intervenir primero lo que se denomina cirugía refractiva para evitar el empleo de las gafas y posteriormente en una segunda intervención el estrabismo, retrasando esta segunda intervención unos meses de la primera.

El motivo de dicho retraso es debido a que en ocasiones puede ocurrir un cambio en la desviación tras la primera intervención, lo cual haría que la segunda intervención, la del estrabismo, no fuese lo precisa que debiera. Correríamos el riesgo, si se hiciese todo en el mismo día, de poder requerir reintervenciones posteriores tanto de cirugía refractiva como del estrabismo por la falta de precisión.

Otros aspectos que debemos tener en consideración a la hora de operarnos del estrabismo, es las condiciones necesarias de higiene postoperatorias, lo cual hace que durante unas semanas debamos estar alejados de baños en las playas o piscinas, trabajos en entornos contaminados, deportes de contacto, etc€ aspectos todos ellos que deberemos considerar a la hora de plantear el tiempo de la intervención.

Igualmente entre los requisitos para operar a un niño, está que dicha intervención debe hacerse con anestesia general y para ello deberemos contar con el apoyo de un equipo de anestesistas acostumbrado a manejar este tipo de pacientes.

La edad no es un problema para dormir a un niño siempre que reúna los requisitos que nuestro anestesista infantil requiera para garantizar la seguridad de la intervención.

La edad, en contra de lo que muchas veces oímos, no es un problema para intervenir del estrabismo, en mi experiencia personal de más de 20 años de ejercicio profesional, tengo intervenidos pacientes de todas las edades, si bien cada caso debe valorarse de forma personalizada y teniendo un equipo de profesionales acostumbrado al manejo de pacientes en ocasiones de edades muy tempranas.

Expongamos todas nuestra dudas a nuestro especialista y decidamos el mejor momento para realizar dicha intervención con los mejores criterios médicos y éticos.

El doctor Carlos Laria Ochaita es director de la Unidad de Oftalmología Pediátrica y Estrabismos. Oftalmar. (Hospital Medimar Internacional de Alicante).