Te imaginas no poder vestirte, no poder comer o ducharte? Estas son algunas de las actividades cotidianas en las que los productos de apoyo resultan de gran ayuda.

Después de sufrir un ictus, un traumatismo craneoencefálico, una enfermedad neurodegenerativa, patologías tras el nacimiento o procesos de envejecimiento, se producen diferentes situaciones de dependencia que pueden beneficiarse de estos dispositivos diseñados para aumentar la autonomía personal.

Los productos de apoyo permiten y facilitan la realización de determinadas acciones que serían muy difíciles o imposibles de realizar por sí mismos. Ayudan a que los usuarios salven las distintas dificultades que tienen a la hora de usar una parte de su cuerpo dañada, perdida o que no responde adecuadamente. Por lo tanto, son el puente entre la dependencia y la independencia de una persona con discapacidad, tanto física como cognitiva.

Dentro de los productos de apoyo podemos encontrar un gran número de posibilidades que ayudan a dotar de independencia a personas que no la tienen, mejorando también su autoestima. Por ejemplo, cubiertos adaptados, tablas para cortar y pelar alimentos, vasos especiales, material antideslizante, etcétera.

El terapeuta ocupacional es el encargado de eliminar todas aquellas barreras que nos impiden ser autónomos. Además, es el profesional que aconseja dentro de la gran variedad de artículos que existe en el mercado, cuál es el adecuado y el que mejor se adapta a cada persona. La idoneidad para el usuario no dependerá de la novedad o precio del producto.

El terapeuta ocupacional también es quien entrena y asesora sobre el uso de estos productos de apoyo en un entorno real, facilitando con ello su manejo y adaptación.

No nos podemos olvidar del cuidador, pieza fundamental en la vida de una persona dependiente. Hay muchos productos de apoyo que sirven para facilitar el cuidado y disminuir la sobrecarga como pueden ser las sillas de ducha, las grúas, sillas de ruedas, etcétera.

En la Clínica Casaverde trabajamos de manera multidisciplinar para garantizar la mejor atención, cubriendo las necesidades de los pacientes. Nuestros profesionales aportan su experiencia, además de ofrecer recomendaciones de productos de apoyo y adaptaciones del entorno.

Concluimos que los productos de apoyo nos ayudan a eliminar los obstáculos que nos encontramos en el día a día, de una manera eficaz, segura y cómoda y sobretodo personalizada para cada uno de los pacientes.