Conocida como el oro blanco, la sal cristalina del Himalaya está ganando en adeptos gracias a sus múltiples beneficios en su uso. Originaria de la mina de Jherum de Pakistán, está considerada la sal más pura y libre de contaminantes que se puede encontrar en el mercado.

Se comercializa en forma de cristal morado, para ser molida justo antes de ingerirla. Pero no solamente sirve para aderezar de una forma más sana la comida, sino también se puede utilizar como exfoliante o como el ingrediente estrella para un relajante baño.

Mejor que la sal de mesa

La sal que todos utilizamos para cocinar y aderezar las ensaladas y otras comidas, está tratada químicamente: está tan depurada que se convierte en clorudo sódico y deja de ser un nutriente. Por ello, es recomendable sustituirlo por esta sal cristalina ya que aunque el precio sea superior, su composición natural la convierte en la mejor alternativa. Sin embargo, es recomendable reducir el consumo de sal en nuestra dieta.

Repone nuestros electrolitos

La sal del Himalaya contiene los 84 componentes básicos que se encuentran en nuestro cuerpo y que son buenos para nuestro organismo ya que nos ayudan a reponer nuestros electrolitos. Todos ellos participan en los procesos fisiológicos del cuerpo, manteniendo un complejo equilibrio entre el medio intracelular y el medio extracelular.

Deliciosos baños relajantes

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Gracias a su rica composición en minerales esenciales y libre de sustancias químicas es muy recomendable realizar un baño caliente relajante con sal del Himalaya al mes. Sus propiedades actúan contra el dolor del reuma, los problemas de piel y además revitaliza el sistema, nos relaja y nos carga de energía.

Sólo tienes que llenar la bañera con agua caliente, verter 200 gramos de esta sal y sumergirte tranquilamente en el agua durante media hora.

Lavados nasales para descongestionar

Como anunciábamos al principio, la sal del Himalaya tiene más beneficios a parte de su consumo gastronómico. Uno de ellos es que ayuda a despejar las fosas nasales cuando están congestionadas. Basta con disolver 9 gramos de sal en un litro de agua tibia. También puedes utilizarlo para hacer gárgaras para la garganta si sufres inflamación o anginas.

Exfoliante natural

La sal del Himalaya se convierte en un remedio eficaz para actuar contra las impurezas de la piel como acné, poros, falta de luminosidad... Sólo tienes que mezclar en un recipiente un poco de agua, rosa mosqueta y 10 gramos de sal cristalina. Con un algodón, aplícate la mezcla en el rostro y déjalo actuar durante 10 minutos. A continuación, lávate la cara con agua fresca. En pocos días, notarás mucho mejor tu piel.

Reafirma la estructura del esqueleto

La sal en exceso aumenta el riesgo de sufrir osteoporosis, una enfermedad ósea que se caracteriza por la disminución de la densidad del tejido óseo y tiene como consecuencia la fragilidad exagerada de los huesos. Gracias a la sal de Himalaya, se reafirma la estructura del esqueleto.

Nos ayuda a regular el sueño

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Al tratarse de un hipnótico natural, la sal del Himalaya es ideal para todas aquellas personas que les cuesta conciliar el sueño, que tienen el sueño ligero o que sufren de episodios de insomnio. No es la solución definitiva, pero ayuda a regular esa necesidad tan básica en nuestra vida.

Mantiene la libido

Debido a sus minerales y elementos naturales la sal del Himalaya ayuda a mantener la libido. El problema sexual más frecuente en la mujer es la falta de deseo (afecta, según los expertos entre el 22% t el 51% de la población femenina) frente a la falta de deseo del hombre (que se sitúa entre el 10% y el 15% de los varones).

Regula la presión arterial

Entre los múltiples beneficios de esta sal pura también está el de estabilizar los latidos del corazón, que junto con el agua son esenciales para regular la presión sanguínea. También conocida como hipertensión, la presión arterial alta puede deberse a la obesidad, factores genéticos, abuso de alcohol, demasiado consumo de sal, estrés...

Previene la aparición de varices en las piernas

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Las varices son venas hinchadas a causa de una acumulación anormal de sangre por la debilidad en las paredes y válvulas de las venas superficiales. Esto hace que las venas se dilaten, provocando que la sangre se acumule de forma fácil cuando alguien está de pie durante mucho tiempo. La sal del Himalaya puede ayudar a prevenir la aparición de varices gracias a sus minerales naturales.