Los niños menores de tres años que son anestesiados para ser operados tienen más probabilidades de desarrollar problemas de aprendizaje en el futuro, según un estudio citado hoy en la prensa australiana.

Sin embargo, el equipo de investigadores australianos y estadounidenses advirtió de que no tiene evidencias suficientes para aconsejar a los padres cancelar o retrasar una operación en caso de necesidad para el niño.

El estudio, realizado por la Universidad de Australia Occidental sobre 2.868 niños nacidos entre 1989 y 1991, fue publicado esta semana en la revista científica "Pediatrics".

La profesora Britta Regli-von Ungern-Sternberg, una de las autoras del estudio, indicó que se comprobó que los niños que fueron operados y anestesiados con menos de tres años tenían el doble de probabilidades de tener problemas de lenguaje y tres veces más dificultades para dominar el razonamiento abstracto a los diez años.

"Pero el estudio no nos permite determinar si la causa de estos retrasos cognitivos se debe a la anestesia, a la operación o al problema médico que requería la intervención", precisó.