Hace justo un año que Irina Shayk y Cristiano Ronaldo dejaron de ser pareja. Tras muchos rumores de infidelidades por parte de ambos y con unas carreras poco compatibles, parece que lo que rompió su relación fue los intereses tan diferentes que tenían ambos. En enero del año pasado, cuando pusieron punto final a sus cuatro años de noviazgo, la prensa se hacía una pregunta: ¿Qué va a ser de Irina ahora que ya no está con Cristiano?

Un año después ya podemos dar respuesta a esa incógnita: sacarle el mismo partido a su nueva pareja, Bradley Cooper, como lo hizo con el astro portugués. Aunque la rusa podría presumir de carrera antes de comenzar en 2010 su relación con Cristiano (ya era imagen de Intimissimi en 2007), lo cierto es que le sirvió para darle un buen empujón.

Durante esos años de relación, trabajó con Morellato, Agua Bendita y Blanco, participó como Mila Belova, personaje del videojuego Need for Speed: The Run y ha aparecido en editoriales en Vogue España (uno de ellos junto a Cristiano y fotografiados por Mario Testino), Vanity Fair Italia, Elle Italia, Vogue México y V Magazine España y fue Megara, la primera mujer del héroe, en Hércules.

En marzo comenzaron los rumores de su relación con Bradley Cooper. El New York Post informó entonces de que se les había visto juntos en el musical de Finding Neverland y unas semanas después se comieron a besos. Hasta entonces, ninguna firma a la altura de Pronovias, una de la más conocidas si no es la que más en el sector nupcial, L'Oréal Paris, de quien es imagen desde octubre, o Givenchy, por quien acaba de fichar como embajadora, se habían fijado en ella y en estos meses que coinciden con su noviazgo con Cooper, sí.