El color, en formas regulares, sólidas y concretas, ha invadido las colecciones "prêt-à-porter" primavera-verano 2013 de las diseñadoras Amaya Arzuaga y Stella McCartney, quienes han desfilado hoy en la semana de la moda de París.

La creadora española Amaya Arzuaga, originaria de Lerma (Burgos), ha presentado sus modelos en los salones de la embajada de España en la capital francesa.

Es la quinta vez que desfila en esta meca de la moda, algo que desde que dio sus primeros pasos como diseñadora había sido "una meta, un objetivo y un sueño", ha explicado Arzuaga en una entrevista a Efe.

"Sigo teniendo respeto y cierto miedo, pero estoy feliz de estar aquí", ha confesado. Para esta colección, ha partido de "la fotosíntesis, lo natural, el oxígeno, la regeneración, la vida", y el proceso creativo ha terminado llevándola hasta "lo orgánico contra lo no orgánico".

De esta combinación entre la naturaleza y la modernidad procede el idea del plástico, presente en gran parte de los modelos.

"Empezamos haciendo la colección en verde y hemos acabado en colores muy puros: verde, rojo, negro y blanco", ha asegurado Arzuaga, quien destacó también la presencia de "degradés" en sus prendas.

Por su parte, Stella McCartney manchó de elipsis de color unos diseños en blanco en su colección "prêt-à-porter" para la próxima primavera-verano.

Los colores sólidos, limitados al naranja, verde y azul, fueron como pinceladas sobre lienzo, en ocasiones veladas por gasas transparentes, mientras que el negro y el blanco construyeron elegantes conjuntos, así como los estampados, de puntos o flores, fueron la nota de originalidad y delicadeza.

Los patrones desmesurados se apoderaron tanto de chaquetas, jerséis y vestidos, como de pantalones largos, en esta colección de la hija del ex Beatle Paul McCartney.

La marca francesa Leonard estrena diseñador, el italiano Raffaelle Borriello, quien ha presentado en esta semana de la moda de París su primer "prêt-à-porter" para la firma.

"He trabajado mucho con las fotografías de Slim Aarons, que era el fotógrafo de la 'jet-set' de los años sesenta y setenta", ha explicado a Efe el creador, quien dio sus primeros pasos en Balmain, para seguir en Gucci, Sonia Rykiel e Yves Saint Laurent.

Su colección evoca esas imágenes de despreocupación en paraísos entonces reservados para la élite, como Acapulco, Capri o Palm Beach.

"Acapulco te hace soñar, hay imágenes extraordinarias", ha asegurado Borriello, quien ha añadido que su objetivo ha sido traducir lo que fue esta estación balnearia mexicana en los años 60 y 70, "con formas más modernas".

Combinaciones de amarillo como el sol, con el negro de la noche, se imprimen en los breves vestidos silueteados de naturaleza.

Como no podía ser menos, los pantalones capri desfilaron por la brillante pasarela, en la que predominó el punto de seda, la "georgette" y las "paillettes" transparentes.

El objetivo era representar a "una mujer que tiene poder, que no tiene miedo del color ni de los estampados, que disfruta de la vida", ha explicado Borriello.

Además, el italiano Giambattista Valli defendió las faldas transparentes y las chaquetas en sus diferentes formas y sentidos.

La escueta paleta de color, en blanco, negro y gris, sólo se vio alterada por la pasión del rojo, en unos modelos donde los pantalones cortos llegaron a su mínima identidad.

Las aplicaciones florales, el encaje, el metalizado dorado y el estampado con brocados han sido los elementos que distinguieron a la colección.

El cierre de esta jornada de moda en París lo puso Saint Laurent, con la primera colección de Hedi Slimane como director artístico de la casa.

Se trata de los primeros diseños de Slimane para mujer, de su vuelta a las pasarelas tras cinco años retirado en la fotografía y de la primera presentación del rebautizado Saint Laurent.

Mañana, otro de las grandes insignias de la moda, Chanel, presentará sus propuestas para la próxima primavera-verano.

Descubre las propuestas "prêt-à-porter"