La última adquisición de una de las parejas de moda, la nueva casa de Sara Carbonero e Iker Casillas en La Finca, pertenecía a la actriz Lydia Bosch. Ahora la revista Semana nos da todos los detalles del interior de la que podría ser la próxima vivienda de la pareja.

La casa tiene 750 metros cuadrados habitables repartidos en cuatro niveles, donde podrán disponer de cinco dormitorios, seis baños, un aseo, un salón de juegos, dos salones de estar, cocina y cuarto de servicio todo un despliegue de espacio en el que la familia podrá disfrutar en compañía de los amigos.

En un principio esta casa se antoja enorme para una familia de tan solo tres miembros, pero todo apunta a que se trata de una inversión a largo plazo y es que posiblemente tanto Sara como Iker pensarán en ampliar la familia en un futuro. La casa también dispone de un gran jardín, perfecto para que los niños jueguen además de una piscina. El inmueble ha sido adquirido por un valor de 2,5 millones de euros.

La casa, que según publica Semana, es un capricho de la periodista deportiva se encuentra dentro de la urbanización 'La Blanca Paloma' una de las más lujosas. El arquitecto, su antiguo dueño Alberto Martín, hizo la casa a su antojo por lo que no se trata de una de las viviendas tipo de la zona.

Los cambios de domicilio de la pareja se han convertido en un habitual y es que ya Sara Carbonero se mudó al chalet de Boadilla del Monte, en el que vivió con Iker su primera etapa de relación. Posteriormente ambos se trasladaron a La Finca, donde ha nacido el pequeño Martín y todo apunta a que habrá una nueva mudanza.

Con esta nueva casa la pareja está preparada para recibir un nuevo miembro en la familia ya que se trata de un inmueble muy amplio, con espacios muy abiertos y para que será disfrutado por una gran familia, como ya aclaró Sara: " Me gustan las familias grandes y quiero tener más hijos".