Sánchez-Barcaiztegui realizó estas declaraciones en el acto de puesta en servicio del acondicionamiento de la CV-95 (pk 4+450 al 5+200); en el término municipal de Bigastro (Alicante);. Allí también destacó el convenio firmado con la comunidad de Murcia en materia de carreteras por el que se establece un acuerdo para la futura autovía que unirá Yecla con Santonera, en la que la Generalitat se compromete a ejecutar el tramo de Pinoso.
En esta misma línea, el secretario autonómico de Infraestructuras también adelantó un proyecto programado para la conexión entre Abanilla (Murcia); y la A-7. Según Sánchez-Barcaiztegui, estas actuaciones "mejorarán la accesibilidad de Alicante por el oeste, abriendo un acceso directo a Madrid, cambiando el esquema de las comunicaciones de la comarca y convirtiéndola en una de las mejores conectadas de España".
El secretario autonómico también ha señalado que la Generalitat tiene previsto invertir más de 1.000 millones de euros en las infraestructuras de la provincia de Alicante y ha anunciado el compromiso de conectar por autovía las poblaciones de más de 10.000 habitantes.
Al margen de las grandes obras, Sánchez-Barcaiztegui ha destacado las actuaciones en materia de seguridad vial que se están desarrollando como es el caso del acondicionamiento de la CV-95 en Bigastro.
La obra, con una inversión de 306.512 euros, ha transformado una peligrosa intersección en una glorieta que permite la conexión de los actuales accesos, además de una nueva apertura que está ejecutado el Ayuntamiento.
La CV-95 une las poblaciones de Orihuela con la costa y presenta una elevada intensidad de tráfico, con un gran número de camiones, recordaron fuentes de la Conselleria de Infraestructuras.
CARACTERÍSTICAS DE LA OBRA
La intersección realizada en Bigastro es una glorieta cerrada de radio inferior 17 metros y calzada anular de 10 metros de anchura, con ramales de conexión con los dos sentidos de la carretera CV-95 y a los caminos y calles existentes a ambos lados de la carretera, permitiendo todos los movimientos posibles.
Los ramales de la CV-95 disponen de un ancho de 3,50 m. separados por una mediana, en tanto que en los ramales correspondientes a los caminos, se disponen de isletas deflectoras con bordillos.
La protección de la acequia de Alquibla se ha realizado con una protección lateral de los muros de mampostería existentes, con muros de 30 centímetros de espesor de hormigón armado, y una losa superior de cubrición de 32 cm. de espesor, ejecutada mediante prelosas y posterior hormigón.
La actuación también contempla la ejecución de una mediana central que impide los giros a izquierda en la fachada urbana de la carretera, así como canalizar el tráfico a fin de evitar adelantamientos indebidos en las proximidades de las intersecciones.
También se han repuesto los servicios afectados --agua y electricidad--, resultando de especial importancia la protección de la acequia de la Alquibla, de acuerdo con la Comunidad de Regantes.
