Irene Albadalejo Carrasco, alumna del Instituto Thiar de Pilar de la Horadada ha obtenido la mejor calificación final de acceso a la universidad de la Comunidad Valenciana tras los exámenes de selectividad. Nada más y nada menos que un 9,91. Irene explica que ha sido cuestión de tiempo, «mucho tiempo», y algo de talento aunque no quiera reconocerlo. Mucho tiempo y alguna escapada para no saturarse, matiza, durante este curso que ya ha terminado...

Se trata de una «nota» obtenida en el itinerario científico sanitario del Bachillerato, resultado de la combinación de las calificaciones en bachiller y la nota de selectividad, un 9,77. Piensa cursar, sin problemas de acceso, claro, la nueva licenciatura de Biotecnología en la Universidad Politécnica de Valencia. Los biotecnólogos, afirma, son capaces de concebir y diseñar la tecnología necesaria para obtener nuevos productos biológicos (fármacos, células, enzimasÉ);, para diseñar instrumentos de análisis (kits de diagnóstico, biosensoresÉ.); o analizar y explotar las bases de datos biológicas y médicas.

De momento esta extraordinaria calificación le permitirá eludir las tasas de matrícula, algo que le había sucedido antes en el bachillerato al obtener matrícula de honor.

Irene Albadalejo cuenta con un gran respaldo. Pertenece a una familia muy conocida en Pilar de la Horadada. Su madre, Paca Carrasco, es profesora del Instituto de Enseñanza Secundaria «Thiar», el único de esta ciudad de 20.000 vecinos, la más meridional de la Comunidad. Su padre es arquitecto. Su tío es el director de cine pilareño Miguel Albadalejo, autor de películas como «Rencor», «Cachorro» o «Manolito Gafotas». Los compañeros de Irene ya bromean disputándose un sitio «en la foto». Eso a pesar de que ayer su mayor interés era más bien «pasar desapercibida», lo que no le impide, por ejemplo, estar enterada de los vaivenes de la política local.

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