La portavoz socialista de Orihuela, Carolina Gracia, defendió ayer la necesidad de poner en marcha una comisión de seguimiento del Plan edificant de la Generalitat para que los «conflictos» que existen en el seno del Partido Popular (PP) entre el alcalde, Emilio Bascuñana, y la edil de Educación, Begoña Cuartero, no dificulten la consecución del objetivo final, que no es otro que la reforma de todos los centros educativos con deficiencias.

La propuesta del PSOE llega después de que la Concejalía de Educación anunciara este fin de semana que ya está redactada la memoria valorada para la ampliación que permitirá eliminar los barracones en el IES Tháder. A ese respecto, se hizo público que en el pleno del próximo jueves se pedirá a la Generalitat la cesión de competencias para poder llevar la obra a efecto, un paso previo obligatorio. Sin embargo, el Ayuntamiento celebró ayer una comisión de Educación y este punto no se abordó, por lo que será necesario convocar una segunda reunión mañana para tratar esta cuestión antes de debatirla en sesión plenaria. Ese fue un hecho que sorprendió al PSOE, que vio una vez más una «falta de coordinación» para abordar un tema que consideran de vital importancia para el municipio. Sin embargo, esa propuesta para impulsar una comisión de seguimiento del Edificant no obtuvo respaldo del gobierno local, formado por un bipartito de PP y Ciudadanos, que ayer votó en contra de esa posibilidad.

Colaboración

Según dijo ayer Gracia, con esa propuesta «ofrecemos la colaboración y participación de todos los grupos políticos, no pretendemos retrasar ni tampoco aumentar la carga de trabajo de los técnicos municipales, por el contario, estamos ofreciendo nuestro trabajo y colaboración para que Edificant sea cuanto antes una realidad». Para la socialista, el hecho de que se anunciara que la memoria valorada del IES Tháder irá este jueves a pleno como asunto de urgencia, pero no se abordara ayer en comisión, evidencia «una vez más el caos en el que convive este gobierno». A juicio de Gracia, «la propia Cuartero debiera ser la más interesada en que los problemas internos que puedan surgir se solucionen en un órgano como sería la comisión que proponemos y no en los pasillos y despachos».