La empresa que venía gestionando los chiringuitos en las playas de Orihuela hasta hace una semana, Chiringuitos del Sol, ha tentado al Ayuntamiento para que le permita reabrir el negocio. Los establecimientos han sido clausurados porque el equipo de gobierno se ha dado cuenta ahora de que el contrato venció en noviembre. Ello ha obligado a acelerar el proceso para elaborar los nuevos pliegos y sacar la contrata a licitación, pero los tiempos corren y el verano está a la vuelta de la esquina. Por ello, la mercantil ha pedido retomar el servicio durante la temporada estival. Lo ha hecho apelando al interés general y defendiendo que se trata de una decisión política que no tendría ningún coste para el consistorio y permitiría garantizar el servicio de restauración, aseos, hamacas o sombrillas sin causar perjuicios a los usuarios.

La dirección de la empresa valoró ayer que el decreto de cierre impulsado por la Concejalía de Contratación, dirigida por Paco Sáez (PP), «deja sin la atención básica a los vecinos y a los turistas, que en un número creciente visitan las playas oriolanas a partir de ahora que comienza la temporada alta», y eso es algo que «está generando un profundo malestar». La mercantil consideró que la solución está en manos del Ayuntamiento porque «atendiendo al interés general» puede resolver una situación que, según advirtió, se puede prolongar varios meses. A nadie se le escapa que la presentación de recursos al nuevo proceso de adjudicación podría retrasar la recuperación de los servicios y pondría en peligro la consecución de las banderas azules de las que alardea el Ayuntamiento. A este respecto, Chiringuitos del sol aseguró que ya tenía diseñado su plan de actividades para la temporada así como preparados los 11 establecimientos y el personal para atenderlos, por lo que la empresa estaría preparada para afrontar la temporada sin problemas.

«Esta propuesta de Chiringuitos del Sol facilitaría los trámites para poner en marcha una nueva licitación del servicio que el Ayuntamiento de Orihuela tiene previsto para las próximas fechas, puesto que evitaría la urgencia de una toma de decisión de esta trascendencia, ya que la atención de esta campaña estaría asegurada por unos equipos de profesionales que han demostrado, en la última década, su capacidad y experiencia», trasladó ayer la empresa a través de un comunicado.

Confusión

Según trasladaron desde el equipo de gobierno, el motivo que ha llevado a esta situación es que hubo una confusión porque los técnicos pensaban que la contrata terminaba a mediados de junio de 2018 y no en noviembre de 2017. El Ayuntamiento ha decidido no prorrogar el contrato con Chiringuitos del sol debido a que existe una investigación judicial por el presunto amaño que se hizo en la adjudicación, un proceso por el cual está procesada la exedil Martina Scheurer (Los Verdes) y el responsable de la empresa.

Los vecinos, a través de la Federación de Asociaciones de Orihuela Costa, consideraron ayer que los culpables de esta situación son tanto los concejales de Contratación y Playas, Paco Sáez (PP) y Luisa Boné (Cs), respectivamente, así como los técnicos municipales de dichas áreas. Su portavoz, Tomás Moreno, dijo que «asumen las reclamaciones de los usuarios porque se ha suspendido el servicio de forma abrupta y eso es malo para el turismo y para las playas, por lo que pedimos que se recupere lo antes posible». Moreno se sorprendió también de que no se tenga claro todavía si todas las instalaciones que ya están en las playas deberían revertir en el Ayuntamiento o si se las quedaría la empresa. Ante las quejas que está habiendo, el Ayuntamiento ha colocado ahora aseos químicos en dos de las playas (Cabo Roig y La Zenia).