El trágico desenlace del niño de 9 años que se chocó con otro mientras jugaba en la playa de La Zenia y la tardanza en llegar la ambulancia del Samu recordó a numerosos residentes de Orihuela Costa que cuentan con un Centro de Emergencias desde hace 9 años, pero del que sólo está construido el esqueleto. Precisamente, medio centenar de vecinos protestaron el pasado domingo, convocados por el partido Claro, frente a las paralizadas obras para instar al Ayuntamiento de Orihuela a que presione a la Generalitat Valenciana para que reanude los trabajos paralizados y cuyas obras se proyectaron gracias al Plan Confianza que puso en marcha el gobierno valenciano de entonces.

Los vecinos de la Costa, con más de 40.000 empadronados y otros 10.000, al menos, residiendo de forma habitual, se quejaron ayer de la ausencia de esta necesaria infraestructura que prevé que allí se instalen, en sus 5.000 metros cuadrados, una comisaría de Policía Local 24 horas, frente a las 8 horas actuales, además de ambulancias, bomberos, Protección Civil, Guardia Civil y socorrismo de playas. Los residentes señalaron que «este edificio puede salvar vidas y estamos sufriendo la incompetencia de algunos políticos y la dejadez que tienen».

El director general de Emergencias, José María Ángel Batalla, y el alcalde, Emilio Bascuñana, anunciaron en diciembre que el proyecto sería una realidad a mediados de 2019, una vez se reanuden los trabajos. El edil de Emergencias, Víctor Valverde, se reunió hace unos días en València con los responsables de la obra, quienes le trasladaron que los pliegos para su licitación ya estaban elaborados, por lo que debía ser inminente. Aunque en Orihuela Costa ya han dejado de ser optimistas.