Izquierda Unida de Torrevieja reclamó ayer que todos los gastos que se deriven de las asignaciones a los grupos políticos se gestionen a través de una central de compras para que el dinero público realmente se utilice para los gastos de funcionamiento de los partidos y no para otros usos.

El concejal Víctor Ferrández realizó en el plenmo un análisis del uso que cada uno de los grupos ha realizado de esas asignaciones, que la ley otorga a cada uno de los grupos con representación para hacer frente a gastos de funcionamiento, en un principio -aunque sigue sin concretarse legalmente- a todo lo relacionado con material de oficina y papelería.

Cada grupo tiene asignada una cantidad fija anual (600 euros, a razón de 50 euros al mes), más un importe variable mensual en función del número de concejales -100 euros por concejal-. Así, por ejemplo, el PP recibe por este concepto, 1.150 euros -mil cien por los once concejales más 50 de la cantidad fija mensual, y culminó el ejercicio pasado con un saldo positivo de diez mil euros. De esos ingresos para el grupo el PP utilizó 3.500 euros de los que ingresó en los servicios jurídicos, tanto para emprender procedimientos como para garantizarse la defensa en otros. Sueña Torrevieja (250 euros mensuales) usó 500 euros en la reforma en su despacho en el Ayuntamiento -en especial en un llamativo cambio de imagen para su espacio de comparecencias de prensa-.

Ciudadanos (250 euros mensuales) ha justificado una parte de las entregas, 978 euros, en la adquisición de herramientas de documentación legal. Tanto Los Verdes (que recibe 450 euros mensuales) como Izquierda Unida (150 mensuales) emplearon la mayor parte del dinero, según figura en su contebilidad en la adquisición de material de papelería y oficina.

Curiosamente los grupos municipales de APTCe y el PSOE renunciaron a estas asignaciones al no presentar un número de cuenta para que fueran ingresadas. En el anterior mandato ambos partidos tuvieron más de una dificultad para justificar qué habían hecho con ese dinero. En el caso del PSOE la mayor parte acabó en transferencias a su asamblea local. El PP lo empleó, además de en letrados, en sufragar publicidad de su gestión, algo que también está haciendo en estos momentos con un nuevo folleto.