El «procés» independentista de Cataluña y la retirada de la Cruz de los Caídos fueron dos de los temas que se abordaron ayer con sorna en Callosa de Segura. La localidad celebró la XXXI edición de Partir la Vieja, que se organiza a mitad de la Cuaresma y que a través de los «viejotes» repasa asuntos de actualidad a modo de crítica y también con carácter reivindicativo.

Dos de los personajes que más llamaban la atención fueron Puigdemont y Anna Gabriel, quienes tras su periplo por Bélgica y Suiza llegaron a los talleres de la Escuela del Cáñamo, que participó con esta propuesta. «Por fin los han encontrado. Estaban escondidos y han pedido asilo y trabajo como cañameros», rezaba uno de los carteles que acompañaban a los muñecos.

El otro foco de atención estuvo si duda en el Calvario, donde otro «viejote» vendía cruces y velas custodias» debido al «fin del negosio», pues la Cruz ya no está en la Plaza de España. Un año más, los colegios y vecinos de diferentes calles se sumaron también a la tradición.