El alcalde de San Fulgencio, Carlos Ramírez, ha suspendido la sesión plenaria prevista para hoy. En dicho pleno, por orden judicial, se debía dar cuenta de la sentencia por la cual ha sido condenado a ocho años y medio de inhabilitación por un delito de prevaricación. La oposición esperaba que el primer edil diera explicaciones en este órgano sobre su complicada situación, pero Ramírez ha anunciado por sorpresa que no puede celebrar la sesión por «motivos personales». Sin más.

El grupo socialista calificó ayer la situación que se está viviendo de «vergonzosa» y consideró que el regidor ha anulado el pleno «en un nuevo y ridículo intento de seguir sentado en el sillón de la Alcaldía». Para los socialistas, «todos teníamos claro que desde el momento en el que se le comunicó su sentencia condenatoria debería de haber dejado el cargo de alcalde renunciando a su acta de concejal». Ahora que el juez le ha comunicado que está obligado «a dar cuenta al pleno de causa sobrevenida de incompatibilidad e irse a su casa, lo suspende». El PSOE recordó que en el auto judicial se hace referencia a sentencias que indican que, en una situación como la de Ramírez, éste debería dejar el cargo, pero eso es algo que no ha hecho.

«No entendemos qué pretende haciendo un ridículo tan espantoso ya que todo esto es una huida a ninguna parte, apoyado como no podía ser de otra manera por sus compañeros en el grupo de no adscritos», concluyó el PSOE.