El bipartito que gobierna el Ayuntamiento de Pilar de la Horadada aprobará el primer presupuesto de este mandato en el pleno programado mañana miércoles. Las cuentas pactadas por el PSOE y Vecinos por el Pilar ascienden a 26.843.825,31 euros y permitirán ejecutar obras que hasta ahora estaban bloqueadas.

El alcalde pilareño, el socialista Ignacio Ramos, ha estado gestionando más de dos años la administración local con el presupuesto prorrogado porque no tenía mayoría para aprobar un nuevo documento económico. La situación ha cambiado desde que José Francisco Albaladejo, de Vecinos por el Pilar, se ha integrado en el gobierno. Ambos grupos suman 11 concejales frente a los 10 de la oposición, formada por el Partido Popular y Unión Pilareña. Fueron ellos quienes redactaron en el anterior mandato las cuentas que han estado en vigor desde 2015. Ascendían a 26.309.997 euros y se han ido prorrogando de forma sucesiva.

El concejal de Hacienda, José Tomás Saura, explicó a este diario que con la aprobación del nuevo presupuesto se conseguirá «regularizar las cuentas municipales y evitar el descontrol que produce la falta de presupuesto en inversiones y servicios por no disponer de un presupuesto actualizado». «Estos tres años hemos trabajado con los presupuestos del año 2015 prorrogados y aún así los servicios se han prestado con total normalidad, pero disponer de un presupuesto es fundamental», reiteró Saura.

Inversiones

Entre las inversiones que se ejecutarán por 1.700.000 euros se encuentra el consultorio médico de Pinar de Campoverde, la recuperación de la pasarela de Mil Palmeras, pavimentación, mejora de zonas verdes, ruta natural Río Seco, cubrir pistas deportivas, reposición de señalización, aulas de formación sociolaboral, mobiliario urbano, accesibilidad la playa de Jesuitas o paseo del Mojón, entre otras.

El proyecto que no se ha incluido en el presupuesto es el relativo a terminar el polémico centro cultural «La Paloma». Albaladejo explicó ayer que se ha decidido posponer porque, tal y como acordó su grupo con el PSOE a la hora de firmar el pacto de gobierno, cualquier solución pasa por realizar una consulta ciudadana para que los vecinos digan si se termina o no. Las obras se paralizaron hace casi 12 años al dispararse el presupuesto inicial de los 2,4 millones previstos hasta los 12 millones, y una vez que ya había gastado seis millones. Para terminarlo se calcula que harían falta entre tres y cuatro millones más. Además, el Ayuntamiento fue condenado después a pagar una indemnización de 2.359.414 euros a la empresa que construyó el edificio debido a que nunca terminó el proyecto y la adjudicataria de las obras no ha podido gestionar la planta de aparcamiento, tal y como se fijó en el contrato. Esa sentencia fue recurrida y se está a la espera del fallo judicial.