Orihuela quiere ofrecer la mejor imagen a los visitantes que vengan a disfrutar de su Semana Santa, de Interés Turístico Internacional. Sus tradiciones centenarias y su valiosa colección de imaginaría religiosa atrae cada año a cientos de turistas que quieren conocer su rico patrimonio y aprovechan también para recorrer la ciudad. Una ciudad que en algunos puntos no presenta el aspecto que debería, con pintadas, mobiliario urbano deteriorado y jardines descuidados. Para tratar de mejorar esta situación, el Ayuntamiento se ha puesto manos a la obra y decenas de operarios trabajan estos días para embellecer la capital de la Diócesis. El reto es terminar la batería de pequeñas obras en menos de cuatro semanas.
Los márgenes del río Segura son las zonas en las que más se está actuando por ser una de las más degradadas. Son una treintena de operarios los que están trabajando en el proyecto «Cauce Urbano Segura Orihuela» a través de un taller de empleo del Servef dotado con 683.600 euros, de los que el Ayuntamiento aportará unos 100.000 del coste de la obra. Aunque los trabajos se desarrollarán durante 12 meses, los primeros resultados ya saltan a la vista. Los operarios reciben conocimientos teóricos en base a unos certificados de profesionalidad de pintura, albañilería y jardinería, y también se incluye una parte práctica en la que se reparará el entorno del río. El proyecto se ha dividido en tres tramos, que abarcan desde el Puente de Las Salesas hasta el Puente Viejo, desde este punto al Puente Nuevo y desde allí puente hasta el Puente del Rey. En estas áreas se acometerá el ajardinamiento de zonas deterioradas, la reparación y tratamiento de pavimentos y mobiliario urbano, la reparación del cerramiento perimetral del río, colocación y pintado de vallado, y la instalación de equipamiento biosaludable.
Otros de los proyectos de mejora puesto en marcha por la administración local consisten en trabajos de reposición y adecuación del entorno y, con operarios municipales, se está trabajando ahora en la Plaza de la Centuria Romana, donde se está restaurando el pavimento y las escaleras de granito. También se dotará de mayor protagonismo al reloj del antiguo Ayuntamiento de Orihuela, que estaba ubicado en la Plaza Nueva, a través de un panel que narre la cronología del mismo. Así mismo, se sustituirán los paneles de cristal existentes en el entorno por barandillas de acero inoxidable y se repavimentará la entrada por la calle Calderón de la Barca al parking público de Entrepuentes, muy deteriorado por la rodadura de los vehículos.
Adoquines
Otra de las acciones que tendrá inició de forma inminente es el proyecto de reparación de todo el adoquinado del casco histórico, que debe estar culminado antes de que loa pasos y cofrades salgan en procesión. Estos espacios presentaban hundimientos por el tráfico desde hace años y las labores que se llevarán a cabo serán principalmente de reparación de baches y hundimientos del pavimento, reposición de adoquines, saneamiento de la base del firme y rejuntado de espacios entre piezas con material que garantice su durabilidad.
También se realizará la poda de arbolado que pueda obstaculizar el paso de los tronos, reposición de elementos florales decorativos, revisión de imbornales, eliminación de grafitis, comprobación de las alturas de cableados y, en esta ocasión, la reposición de lonas ornamentales que fueron sustraídas en dos vallados de solares en calle Francisco Díe y junto a la Plaza de Santiago.
