La experiencia de turismo marinero comienza en tierra con la visita a la lonja y la subasta, y sus peculiaridades, entre ambiente marinero, la flota artesanal de cerco o los remendadores. Después el grupo se traslada en barco hasta las zonas donde los barcos de artes menores están capturando el pescado, cerca de la bahía. La jornada culmina con la degustación elaborada con pescado azul del día,

con uno de los boquerones y la sardinas más apreciados del Mediterráneo.