El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana (PP), firmó ayer en Madrid con el presidente de ADIF, Juan Bravo, el convenio del AVE, aprobado el viernes en pleno que se arrastraba desde hace más de una década. «El acuerdo es el más beneficioso para Orihuela ya que elimina cualquier contraprestación urbanística como sí recogía el anterior convenio», dijo el regidor.

«Los acuerdos no son sólo favorables a nivel económico, de un acuerdo actual de 998.882 euros frente a los 6 millones de euros que se planteaban en el anterior mandato, sino también en concepto, consiguiendo que las obras estén completamente finalizadas, suscribiendo un convenio que recoge además el refuerzo de la losa; la construcción de una nueva pasarela peatonal que dé acceso a Correntías y que costeará ADIF, presupuestada en 1.100.000 euros; y la adquisición de 25.000 metros cuadrados de la losa que pasarán a ser de titularidad municipal», explica el gabinete de Comunicación.

En otro orden de cosas, ayer la aprobación del pago de facturas y cuestiones urbanísticas protagonizaron la junta de gobierno, en la cual se acordó la demolición de una estación de servicio en la carretera de Torremendo y la paralización de dos obras. En la reunión, también se procedió a dar destino del edificio de los antiguos juzgados a dependencias municipales, tal y como recoge el convenio con la Generalitat.

Igualmente se dio luz verde a la ampliación de una vivienda y la construcción de otras diez con piscina. Otro de los acuerdos alcanzados fue la aprobación del proyecto de reglamento del Consejo Sectorial de Igualdad, que irá al pleno de febrero. En Inmigración, se procedió a la aprobación de justificación de subvenciones a asociaciones sin ánimo de lucro, correspondiendo a Vega Baja Acoge 23.5577,90 euros y a Recicla Alicante, por 7.650 euros.