Los políticos nunca dejan de sorprender y tienen esa costumbre de, en muchas ocasiones, decir que no a las propuestas de los rivales políticos y aprobar lo mismo si lo proponen ellos. Es lo que, previsiblemente, va a suceder en Orihuela con el la adhesión al Plan Edificant de la Conselleria de Educación que prevé reparar y construir colegios e institutos en la Comunidad Valenciana desde 2018 a 2022 con un presupuesto de 700 millones de euros. El pleno de Orihuela rechazó en noviembre la adhesión del municipio, con múltiples deficiencias en materia de infraestructuras educativas, como pidió en una moción el PSOE (en la oposición), que no secundaron ni PP ni Ciudadanos, ambos en el gobierno oriolano. En ese momento justificaron su voto negativo en no tener claro el plan y que esperarían a una reunión que se produjo el 12 de diciembre en València. Pero en ésta, a la que acudieron en alcalde Emilio Bascuñana y la edil de Educación, Begoña Cuartero, tampoco vieron claro el asunto y no se comprometieron a adherirse al plan para que la Generalitat cubra las necesidades en materia de infraestructuras educativas. Algo que puede tener los días contados a tenor de lo aprobado anoche por la ejecutiva del Partido Popular de Orihuela. Los populares dieron el visto bueno a la adhesión del Ayuntamiento al Plan Edificant, es decir, a instar al Consistorio, en el que gobiernan junto a Ciudadanos, a que se una al plan para que la Generalitat pague las obras que necesitan nuestros centros educativos". Entre los miembros de la ejecutiva popular está la concejal de Educación, Begoña Cuartero, que ahora dice sí a la adhesión.

Los populares quieren que "la Generalitat Valenciana ejecute de forma urgente y necesaria las obras que necesitan nuestros centros educativos, obras que en algunos casos nos deben desde hace años y que en la mayoría de ellos superan, además, el presupuesto de mantenimiento que se destina por parte municipal a estas infraestructuras", ha asegurado la secretaria general local, Begoña Cuartero. Cuartero ha recordado que el grupo popular llevó a pleno en noviembre una moción en la que se instaba a la Conselleria de Educación "a que procediera de forma inmediata a la ejecución de las actuaciones estructurales necesarias, y que si no era así el Ayuntamiento pediría una delegación de competencias para que, con financiación de la Generalitat, se lleven a cabo las actuaciones a través de un procedimiento ajustado a la legalidad".

Una vez conocidas las prioridades de las comunidades educativas, el PP señala que "lo más urgente es la ampliación del IES Tháder para acabar de una vez con los barracones", algo que podría ocurrir con la adhesión al Plan Edificant a través del procedimiento previsto en el Decreto 5/2017 del Consell, "agilizando las obras de ampliación puesto que la Conselleria de Educación se ha declarado incapaz de realizarlas y delega sus competencias a los ayuntamientos". La comunidad educativa de este instituto criticó ayer que desde el Ayuntamiento no se pusieran en contacto desde la última reunión mantenida e instó, precisamente, a la adhesión al Plan Edificant para que se ejecuten los trabajos necesarios. Aunque, según Cuartero, se trata de "una maniobra para salvar su promesa de construir 140 centros educativos en la Comunidad Valenciana que ya sabemos que no se va a cumplir".

Los populares expusieron anoche otras necesidades en materia de infraestructuras educativas que, dijeron, "desde el PP se quieren impulsar", como la restauración estructural de la fachada y red de saneamiento del CEIP Virgen de la Puerta, la renovación de la instalación eléctrica del CEIP Nuestra Señora de Monserrate de Molins, el muro del CEIP Los Dolses, la adaptación de los aseos en el Centro de Educación Especial Antonio Sequeros, las actuaciones estructurales necesarias en la Escuela de Arte (con más de 45 años de antigüedad y que superan el presupuesto de mantenimiento), las entradas a los patios del CEIP Nuestra Señora de Belén de La Aparecida y CEIP de San Bartolomé, así como la renovación de prácticamente todas las pistas deportivas de los colegios de Infantil y Primaria de Orihuela, sin olvidar la retirada de amianto en aquellos que todavía no se ha hecho.

El PP de Orihuela dice haber acordado impulsar esa adhesión del Ayuntamiento al Plan Edificant "ya que la administración competente, que no es otra que la Conselleria de Educación, no agiliza los trámites", ha asegurado el presidente del PP oriolano, Dámaso Aparicio, quien ha añadido que "la educación es esencial y el derecho a la misma no sólo debe estar garantizado en su acceso, sino en las condiciones que los centros educativos presentan para el alumnado de nuestro municipio".