El alcalde de Dolores, Joaquín Hernández (PSOE) quiso responder ayer las declaraciones de la oposición en bloque que rechazan el proyecto de planta de transferencia de basuras. El primer edil arremetió contra el PP, en primer lugar, preguntándose si esta formación no quiere, en este caso, este proyecto en Dolores porque se contempla que sea la iniciativa pública, a través de la empresa Vaersa, y no la privada la que lo ejecute. «¿Qué ocurre? ¿Que si no hay negocio no hay solución para el PP al problema de la gestión de los residuos?», se preguntó.

Sobre las movilizaciones anunciadas por Cs, Hernández dijo que solo conoce la de los más de 180 vecinos que han visitado una planta de transferencia en Sagunto para conocer cómo funcionan y que están convencidos de que se puede implantar sin problemas en el municipio».

Y las de «50 vecinos que han venido al Ayuntamiento a pedir trabajo cuando se ponga en marcha», dijo el alcalde, aunque este tipo de instalación necesita a muchos menos operarios.

El equipo de gobierno considera «positivo» para el municipio esa inversión e insiste en subrayar que una planta de transferencia no es una vertedero, sirve para trasladar los residuos de varios muncipios a una planta y que de ahí puedan llevarse a un vertedero autorizado de eliminación, reduciendo los costes de transparte.

Hernández insistió a Renovación que en el expediente solo hay un protocolo de intenciones y un informe de idoneidad de los terrenos que el municipio cedería en el polígono industrial, de unos seismil metros. «Y está a disposición de la oposición que solo quiere causar alarma y confusión».

Por otra parte, Hernández dijo que la parcela que visitaron los edils cuenta con permiso del municipio para que la empresa de recogida la use para acopio de podas y recogida de enseres. «Si los residuos están esparcidos es porque desafortunadamente hay gente que rebusca en los contenedores. El recinto se limpia periódicamente», aseguró.