Los padres del colegio Cervantes de Albatera, donde se han detectado cinco casos de hepatitis A, dos de ellos en octubre y tres la semana pasada -a los que hay que también hay sumar a dos madres de estos menores-, han decidido que sus hijos no vuelvan a clase hasta que acabe la huelga de limpieza y el centro educativo esté completamente limpio. Lo mismo harán los del colegio Virgen del Rosario a partir del día 11 si la situación no cambia.

Así se acordó ayer, al mismo tiempo que se desconvocaba una protesta de padres prevista para esta mañana a fin de conseguir presionar a las distintas administraciones (local y autonómica) para que logren poner fin a la huelga de los trabajadores de la limpieza de edificios públicos, que dura ya un mes, como consecuencia de que llevaban tres meses sin cobrar de Liasur, que ha presentado concurso de acreedores. Los padres consideran que existe una relación directa entre ambos hechos puesto que este tipo de la enfermedad está muy relacionado con la higiene y se contagia por contacto. Y cuando el colegio esté limpio, entonces, no habrá problemas, pero hasta ese momento no van a entrar a clase.

Así las cosas, hoy sólo está previsto que acudan al centro educativo los niños de las tres clases donde se declararon los casos pues el Departamento de Salud enviará un equipo sanitario a fin de proceder a la vacunación de todos ellos, alrededor de 70. Mientras tanto, el Ayuntamiento habló ayer con los padres no sólo del Cervantes, sino también los del Virgen del Rosario y Santiago Apóstol, para informarles de las gestiones para poner fin a la huelga, lo que pasa por que otra empresa asuma el servicio y a los trabajadores.

En este sentido, el portavoz de una de las AMPAs explicó a INFORMACIÓN que se había nombrado un administrador concursal. Es decir, una persona que puede tomar decisiones para buscar una solución, aunque tampoco parece que éstas vayan a llegar a corto plazo. La Conselleria de Educación ha asegurado a los padres que se encuentra atada de pies y manos en un conflicto que atañe al Ayuntamiento, como responsable de la limpieza de los centros educativos y las familias se muestran desconfiadas de que todo vuelva a la normalidad esta misma semana, aunque la desconvocatoria de la protesta prevista para esta mañana haya sido un voto de confianza.