Una palmera del Palmeral de Orihuela, infestada de picudo rojo, cayó ayer sobre las 10.30 de la mañana sobre la acera y la carretera del barrio de San Antón. Afortunadamente en el momento de la caída de la balona y las hojas del ejemplar, no circulaba ningún vehículo ni pasaba ningún viandante, lo que evitó daños personales ya que el corazón de la palmera y las palmas pesan decenas de kilos.

La palmera centenaria estaba dentro del Centro Social de San Antón, pero cayó en el exterior del recinto, junto a la puerta. El ejemplar estaba plagado de larvas de picudo rojo que quedaron esparcidas por la acera y la carretera. Éstas se van comiendo las palmeras por dentro y las debilitan. Esto unido a las fuertes rachas de viento que hubo ayer provocaron la caída de la palmera, de unos 15 metros.

Los Bomberos, cuyo parque se encuentra muy cerca de donde tuvo lugar la caída, estuvieron retirando las ramas e inspeccionando que otros ejemplares no estuvieran debilitados y corrieran la misma suerte.

Usuarios del polideportivo se quejaron de que el Consistorio no hubiera precintado la zona por el fuerte viento y el riesgo de caída de los muchos ejemplares enfermos que tiene El Palmeral, declarado BIC. Los vecinos del Barrio de San Antón pidieron medidas más contundentes contra esta plaga que se está expandiendo preocupantemente. Uno de los residentes, Emeterio Navarro, explicó que «minutos antes había pasado un grupo de chavales que entrenan en el polideportivo, podría haber habido una desgracia» y pidió al Consistorio «que haga un protocolo de actuación ya que son muchas las palmeras viejas y afectadas y ésta ha caído a tan sólo 20 metros del lugar donde se precintó una palmera y necesitan un experto para detectar las plantas afectadas». La palmera caída tenía en su interior cientos de picudos en todas sus fases desde huevos, hasta larvas y adultos.