La dirección provincial del Partido Popular (PP) tiene previsto elevar hoy mismo al Comité de Derechos y Garantías una petición inmediata para la expulsión de cinco de los seis ediles que le quedaban en el Ayuntamiento de San Fulgencio después de que el alcalde, Carlos Ramírez, presentara la renuncia tras haber sido condenado a ocho años de inhabilitación para cargo público tras una condena por prevaricación administrativa. El único que sigue es Manuel Gómez, quien lo hará desde la oposición porque ayer fue el único que cumplió la orden del partido de abandonar el equipo de gobierno.

Ramírez ha decidido seguir en política, al menos, hasta que se resuelva una cuestión que ha planteado en ejecución de sentencia porque después de haber recurrido su condena ante la Audiencia Provincial ha pedido al mismo tiempo que se ejecute la misma. Durante estas semanas, el PP se había dado un margen para nombrar una gestora para dirigir el partido, ya que Carlos Ramírez era al mismo tiempo el presidentepresidente, pero los acontecimientos se aceleraron la semana pasada después de que la oposición elevara sus críticas por esta insólita situación, después de que se esté tramitando la adjudicación del contrato más importante del municipio, el de la limpieza y basura, por 22 años y 16 millones de euros. PSOE e independientes no entendían que un alcalde condenado y apoyado por ediles del PP lo sacara adelante y culparon de esta situación a Isabel Bonig. Acto seguido, el PP provincial reaccionó, máxime porque mañana viernes está prevista la visita de la presidenta regional a un acto en Albatera.

Reparto

El reparto de fuerzas en el Ayuntamiento de San Fulgencio es cuanto menos insólito pues aunque el plenario está compuesto por 13 concejales sólo acuden 12 al mismo, tal y como ya publicó el diario. El ausente en Mariano Martí, quien fue condenado hace más de un año a una pena de inhabilitación, pero no ha dejado su acta. Por tanto, Carlos Ramírez y los cinco ediles que dejan el PP tendrán la mayoría porque pueden echar mano del voto de calidad del regidor; además, el concejal de UPyD está integrado en el equipo de gobierno, así el reparto es de siete contra cinco. Es decir, pueden sacar adelante todo aquello que consideren.

Rafa Candela, coordinador provincial, ha asegurado que se siente "engañado" por los concejales, pues la mayoría le garantizó que estaban dispuesto a seguir en el PP, lo que les hubiera supuesto abandonar hoy sus atribuciones en el equipo de gobierno y pasar a la oposición, dejando a Carlos Ramírez solo, sin nadie en el equipo de gobierno. Curiosamente, entre los que han dado la espalda al Partido Popular se encuentra Vicente Murcia, quien fue nombrado al frente de la gestora hace sólo unos días. El PP ahora se tomará unos días para ver cómo recompone la insólita situación en la que se encuentra en San Fulgencio, municipio en el que ha gobernado este mandato con mayoría absoluta.