El sector agroalimentario, el más importante a nivel económico de la Vega Baja, pasa por uno de sus peores momentos a causa del déficit hídrico que es ya muy preocupante en el sureste peninsular y, sobre todo, en la comarca. El II Symposium Internacional del Sector Agroalimentario de la Vega Baja (SYA Orihuela), que se inauguró ayer en el Auditorio de La Lonja, puso a todos los presentes de acuerdo, incluidos los políticos de distinto signo, en una realidad: es urgente la llegada de agua para evitar que el principal sector económico sufra consecuencias que podrían ser irremediables en algunos casos. El secretario autonómico de Agricultura y Desarrollo Rural, Francisco Rodríguez Mulero, fue más allá al predecir que la huerta de la comarca no soportará más allá de dos meses la falta de recursos hídricos. Rodríguez hizo hincapié en que «si en los próximos dos meses la Vega Baja no tiene un aporte adicional de agua, no va a poder mantener su actividad económica con normalidad y esto afecta a muchas familias». El alto cargo de la Generalitat Valenciana instó a «dejar atrás las guerras políticas y sentarnos todas las administraciones para buscar soluciones y si hay que hacer un trasvase de emergencia, que se haga, y si hay que poner en marcha bombas para abastecer al riego tradicional, que se pongan» y añadió «que los aportes lleguen a esta comarca de dónde sea, de la reutilización de aguas residuales, de la desalación o del trasvase». También instó a la reapertura de los pozos de sequía, tal y como anunció la ministra Isabel García Tejerina hace una semana.
Expertos universitarios y técnicos se dan cita en ese simposio cuyo lema esta edición es, precisamente, «Agroalimentación, agua y sostenibilidad» y en el que participan más de 60 empresas. El alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, destacó durante la presentación de las jornadas que «lo del agua es un tema que hay que solucionar con altura de miras ya que necesitamos agua de calidad, en cantidad suficiente y a un precio razonable para ser competitivos» y coincidió con el secretario autonómico en reseñar que «no podemos jugar a ser oportunistas con este tema o a querer sacar un rendimiento político». «Queremos que la huerta de Orihuela y la de la Vega Baja lidere el mercado como merece, que sea objeto de estudio en el resto de universidades y que sea un atractivo para empresas de sectores relacionados como la gastronomía», dijo Bascuñana ante las más de 400 personas acreditadas ayer para asistir a las diferentes conferencias.
Optimista
A pesar de que las alarmas sobre el déficit hídrico están centrando este simposio, el secretario autonómico de Agricultura es optimista y confía «en el potencial de la Vega Baja, una comarca que ha demostrado su capacidad de regeneración», señaló. «Tenemos tecnología suficiente para atender todas las necesidades, sólo falta que nos pongamos todas las administraciones de acuerdo (...) tenemos agua del mar para desalar y tecnología y suficiente inversión para poder reutilizar el agua, además del trasvase Tajo-Segura, recursos hídricos que ya quisiera tener gran parte del mundo y sólo hay que ser capaces de gestionarlos».
El agroalimentario es el primer sector exportador del país y mueve 80.000 millones de euros, una importante parte en el sureste. Este simposio está poniendo de manifiesto que el cambio climático es evidente, pero que no se están poniendo en marcha las medidas para atajar sus efectos, que afectan, y mucho, a la agricultura. Un dato que se dio ayer es que si el conjunto de la Comunidad Valenciana reutilizara todo el agua que va a las depuradoras, la región tendría 300 hectómetros más de agua al año para su uso. «Es cuestión de voluntad, también de dinero que no tenemos por la infrafinanciación», explicó Francisco Rodríguez quien aprovechó la ocasión para lanzar un dardo a la Confederación Hidrográfica del Segura de la que dijo «lo único que ha hecho es confrontar el uso del agua de boca con el regadío y así lo creemos desde la Generalitat».
Programa
Sya Orihuela se ha convertido en un evento consolidado impulsado por la Universidad de Alicante y la Miguel Hernández de Elche que cuenta con el apoyo del Juzgado Privativo de Aguas de Orihuela y el de Callosa, además del Ministerio de Agricultura así como la Conselleria de Agricultura. Si la jornada de ayer se dedicó a la industria agroalimentaria, la agricultura y la ganadería, hoy estará centrada en el agua y el regadío como soportes de esa industria con ponencias sobre la solución al déficit hídrico, la huella hídrica en el sector agrario de la comarca, la gestión del riego en condiciones de escasez, la salinidad y la calidad del agua en el manejo del riego y habrá, a las 12, una mesa redonda sobre la modernización de regadíos tradicionales.
