El restaurante y cafetería del Centro Municipal de Ocio (CMO), conocido popularmente como Macrodiscoteca de la Tercera Edad de Torrevieja, va a echar el cierre en las próximas horas. Y no hay fecha prevista para su reapertura. Así lo anunció ayer el alcalde José Manuel Dolón (Los Verdes) y la edil de Gente Mayor, Fabiana Ibarra (PSOE). El argumento es que se está ultimando la licitación por la que se sacará a concurso la explotación de las cafeterías de la red de centros de la tercera edad y CMO.

En los centros del Acequión (calle Rafal), La Punta (calle Pedro Lorca), Centro (calle San Pascual) y centro polivalente de La Mata ya hace muchos meses que dejó de prestarse el servicio porque las empresas responsables carecían de contrato en firme con el Ayuntamiento. Tampoco cuenta con contrato la empresa que lo realiza en el CMO. El regidor, acompañado de una pareja de policías, acudió por la tarde para explicar a los afectados las razones del cierre.

Por la mañana, en rueda de Prensa, Dolón explicó que en el caso del CMO, y de forma excepcional, se decidió que la empresa que prestaba el servicio continuara realizándolo pese a no contar con contrato, dado que es «esencial» para el funcionamiento de estas instalaciones, por las que pasan entre 400 y 800 usuarios diarios, en función de la época del año, según explicó. «Lo hemos mantenido todo lo que ha sido posible. Pero ahora los técnicos son los que tienen que entrar para realizar un inventario de las instalaciones, y también para valorar si son necesarias obras», antes de licitar el servicio, argumentó.

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El alcalde también aseguró que se le explicó esta situación hace tres meses a los usuarios que ejercen como portavoces del colectivo -al contrario que en el resto de centros de la tercera edad, el CMO carece de asociación y junta directiva-. El problema es que en torno a la restauración, bastante asequible para los bolsillos de los usuarios, giran el resto de actividades, en especial el baile, pero también la estancia de los usurarios en el recinto. La edil Ibarra indicó que esta actividad, la del baile, se seguirá realizando con la «colaboración de los conserjes».

José M. Dolón también indicó que comparecía para informar por anticipado para evitar que se malinterpretara el cierre y aclaró que desconoce cuánto tiempo puede prolongarse la situación, aunque espera que la adjudicación esté resuelta en «breve». El primer edil no descartó un cierre completo de todas las dependencias del CMO si es necesaria una obra de entidad para adecuar la zona de restauración de cara a ofertarla en concurso.

El CMO es un edificio construido a mediados de la década pasada a la par que el centro comercial situado en la parcela anexa con una inversión de 1,7 millones de euros. Tiene una capacidad para albergar a 1.500 personas. Es un edificio de 2.000 mil metros cuadrados con 900 de sala de baile y una primera altura de 500 metros cuadrados enfocada a la enseñanza de baile. Es un recinto muy popular en un municipio donde más de un tercio de la población supera los 60 años. Durante sus primeros años de andadura solo se empleó para la tercera edad pero también se ha diversificado para otros usos.