La Policía Judicial de la Guardia Civil investiga los graves hechos que se produjeron en la madrugada del viernes al sábado en las inmediaciones del Ayuntamiento de Orihuela en la costaOrihuela . Tres vehículos, propiedad de agentes de la Policía Local del municipio, resultaron quemados en un incendio intencionado que se produjo sobre las 3.45 de la madrugada.

Dos de los coches quedaron calcinados en el siniestro. Son los que estaban situados en un aparcamiento junto al edificio consistorial, en la calle Pablo Picasso, en playa Flamenca. Un tercero, estacionado también muy cerca del edificio, en el que se encuentra el retén de la Policía Local en la costa oriolana, resultó seriamente dañado tras ser también incendiado.

Los tres vehículos pertenecen a agentes de la Unidad de Orihuela Costa de la Policía Local, que se encontraban en esos mismos momentos de patrulla en las calles, coincidiendo con el momento en el que menos efectivos trabajan en el interior del edificio policial. Tanto la Policía Local como la Guardia Civil están comprobando las cámaras de vigilancia del Ayuntamiento y de los comercios y negocios de la zona para intentar esclarecer los hechos y dar con el o los culpables de estos incendios provocados que han quemado tres vehículos particulares de agentes de la policía local.

Los coches se encontraban estacionados en la vía pública, sin protección, como en el resto de retenes policiales, porque no hay espacio disponible en el edificio municipal para aparcarlos ya que el único lugar disponible para que pudieran resguardarse los coches está siendo usado como almacén.

Condena

La edil de Seguridad Ciudadana, Mariola Rocamora, condenó ayer estos «gravísimos ataques» contra vehículos de agentes policiales. «Siento mucha rabia e impotencia. Lo ocurrido en Orihuela Costa rebasa la línea del vandalismo y es de una extrema gravedad y confío en que pronto se pueda detener a los causantes de estos incendios provocados». «Han ido a por ellos porque sus coches estaban aparcados en distintas zonas y no atacaron a otros vehículos».

Rocamora anunció ayer a este periódico que se van a reforzar las medidas de seguridad en todos los retenes policiales de la localidad. «Aunque ya hay cámaras de vigilancia, si hay que poner más o una mayor iluminación lo haremos para que no se vuelvan a repetir estos desagradables incidentes». La edil reconoce que los hechos han generado «alarma» entre los agentes y confirma que es la primera vez que se producen unos hechos similares en el municipio.

Por su parte, la Policía Local, en las redes sociales, publicó que «hacer bien nuestro trabajo puede tener consecuencias negativas» y condenó estos ataques «que suponen un grave perjuicio económico para los agentes y un grave atentado contra el Cuerpo».