La Concejalía de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos Sólidos Urbanos anunció ayer que prepara los trámites para la adquisición de máquinas sopladoras silenciosas con las que acabar con «las molestias por ruido que ocasionan las que realizan el servicio en la actualidad», con ello pretende acallar las quejas vecinales, asegura en un comunicado.

«Con esta medida lograremos cumplir con una de las demandas más solicitadas por la ciudadanía, puesto que durante más de seis años ha sido el número uno en quejas por el ruido que provocan», dijo el concejal Dámaso Aparicio, quien apuntó que la maquinaria que se va a adquirir hará «un ruido similar al de un secador de pelo», sobre 60 decibelios.

Las nuevas sopladoras serán eléctricas, lo que también permitirá un ahorro en gasolina. De hecho, está previsto que la inversión a realizar, que asciende a unos 21.000 euros, se amortice en año y medio. También se mejorará la calidad del trabajo puesto que las nuevas pesan cinco kilos menos.