La carretera CV-912, que une Almoradí y Dolores, es, desde ayer, más segura. La vía cuenta ya con dos carriles ciclo-peatonales, una nueva rotonda de acceso a Daya Nueva y una mediana en el eje de la calzada, que permiten mejorar la seguridad vial.

La Conselleria de Obras Públicas ha financiado los trabajos en los que se han invertido 365.000 euros, y que han consistido en la creación de dos bandas ciclo-peatonales laterales, de 2,50 metros de ancho, adosadas a la calzada de circulación y a su misma cota, separadas de la misma mediante un bordillo discontinuo. También se ha implantado una mediana en el eje de la calzada, para reducir el riesgo de accidentes por choques frontales y para impedir cualquier giro a la izquierda.

Esta vía soporta una media de más de 8.000 vehículos diarios, sobre todo pesados, y se encontraba muy deteriorada, con numerosos baches y roderas, por lo que se ha reforzado y renovado superficialmente el pavimento, para detener la degradación del firme y aumentar la adherencia de los neumáticos al pavimento. La actuación contempla también la reposición de toda la señalización horizontal y vertical.

Las obras fueron inauguradas ayer por el director general de Obras Públicas, Carlos Domingo, quien señaló que «la vía atraviesa una zona de gran actividad industrial que adolecía de múltiples accesos desordenados y mal canalizados, con riesgo de accidentes».