La capital histórica de la Vega Baja tiene la intención de convertirse, en un corto plazo, en «Smart Orihuela». No se trata de un nuevo modelo de coche sino que es el nombre del proyecto que está desarrollando el Ayuntamiento para convertirse en una ciudad inteligente a través de la implantación de las Tecnologías de la Información y la Comunicación (Tics) y de los servicios inteligentes en ámbitos como la recogida de residuos, la eficiencia energética, la iluminación urbana, la gestión del tráfico, el riego o las flotas municipales.
El Consistorio trabaja ya en el desarrollo de un plan director para materializar las diferentes ideas que puedan permitir a Orihuela convertirse en una «Smart City» o ciudad inteligente. y que permita redactar los pliegos de condiciones necesarios para poderlas poner en marcha.
Pero ser una localidad que destaque de otras por sus servicios inteligentes no es barato. Entrar en el selecto grupo de ciudades de este tipo requerirá una inversión de 20 millones de euros, según anunció ayer el alcalde de Orihuela, Emilio Bascuñana, en la presentación de «Smart Orihuela». La mitad de la inversión saldrá de los fondos europeos Feder de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrado (Edusi), entre los que se incluye un programa de dinamización de la administración electrónica para la transformación digital de la ciudad, con un total de 10 millones de euros. Los otros 10 millones saldrán de las arcas municipales. «Primero debemos acabar ese plan director que nos marque cuáles son las prioridades en la ciudad para implantar los sistemas inteligentes», señaló Bascuñana.
Orihuela se unió en marzo de 2016 a la Red Española de Ciudades Inteligentes, de las que ya hay 82 repartidas por todo el territorio nacional. Según explicó ayer el regidor, su término municipal es «ideal para beneficiarse de la aplicación de las nuevas tecnologías para modernizarnos, ser más eficientes, reducir el gasto público y optimizar los recursos para tener una vida más agradable, cómoda y de mayor protección ambiental».
Medidas
En la gestión de los proyectos inteligentes se implicarán todas las áreas de gestión del Ayuntamiento. Entre las medidas que están sobre la mesa y que se estudiará implantar en la ciudad se encuentran un novedoso sistema de control del tráfico y de videovigilancia, el riego inteligente de parques y jardines para gastar lo justo de agua, una mejor iluminación urbana con farolas que cuenten con ahorro energético o la curiosa iniciativa de instalar sensores en los contenedores de basura de la ciudad que estarán conectados a un sistema que permitirá saber a los operarios si están llenos o vacíos, y en este último caso, no hacer el viaje en balde con el camión.
A la presentación de ayer acudieron representantes de la Red Española de Ciudades Inteligentes, que llevaron un coche eléctrico como ejemplo de sostenibilidad. Pablo Rodríguez, de esta red, señaló que «Orihuela cuenta con los requisitos para formar parte por su capitalidad de comarca y su extensión» de 365 km2.
