Un instituto y su parcela en tierra de nadie. Es la insólita situación en la que se encuentra el antiguo IES Vega Baja, situado en el barrio de El Palmeral. El Ayuntamiento de Callosa de Segura lleva dos años preguntando a la Conselleria de Educación sobre la propiedad y responsabilidad de mantener el solar con el objetivo de llevar a cabo una rehabilitación del entorno porque su degradación molesta, y mucho, a los vecinos.

La respuesta ha sido el silencio administrativo, como critica el alcalde de Callosa de Segura, Fran Maciá (PSOE). «No podemos esperar a que el asunto espere el sueño de los justos, tenemos que saber con certeza si la parcela está cedida al Ayuntamiento, como se dijo en las Cortes Valencianas, o si la limpieza y el mantenimiento deben correr a cargo de la Generalitat, como correspondería si es el dueño de ese bien», señala, enfadado, el regidor callosino.

Si la respuesta no llega en un plazo razonable, el Ayuntamiento tiene revisto revertir la cesión del bien de manera que la parcela y el centro pasen a ser de propiedad municipal con todas las garantías para poder actuar con plena seguridad jurídica en dicho terreno e instalaciones para poder rehabilitar la zona, que se ha convertido en un foco de suciedad y de infección junto a las viviendas de los vecinos de ese tranquilo barrio, que también son testigos de como los «okupas» se han adueñado de las instalaciones.

De momento, el Consistorio, cansado de esperar, ha iniciado esta semana labores de desescombro y limpieza de los solares del viejo edificio abandonado que acogió hace años al Instituto de Educación Secundaria Vega Baja. Trabajos que sufragará el municipio. El equipo de gobierno quiere recuperar las pistas deportivas del centro para el vecindario ante la «inacción» que denuncia el alcalde callosino por parte de la Generalitat.

Este edificio, en desuso desde hace más de 10 años, se encuentra inscrito en el inventario municipal como bien revertible desde que se cedieron al Ministerio de Educación, por acuerdo de pleno el 23 de junio de 1983, un total de 10.000 metros cuadrados destinados a la construcción de un centro de formación, pero no existe un documento formal de aceptación de la cesión por parte de la Conselleria de Educación que, sin embargo, implícitamente aceptó la misma al construir de su propia cuenta un instituto de segunda enseñanza el «Vega Baja», que fue inaugurado en 1986. Posteriormente, los alumnos de este centro fueron trasladados al nuevo IES Vega Baja que abrió sus puertas el 24 de enero de 2008, fecha desde la cual el antiguo edificio y su parcela se encuentran en una lamentable situación de abandono.

La finca, no obstante, se encuentra inscrita en el registro de la propiedad y en el registro del catastro a nombre del Ayuntamiento de Callosa de Segura.