La Policía Local de Callosa de Segura ha incorporado el «drogotest» como una herramienta más en las labores de prevención del tráfico de la ciudad. Se trata de un dispositivo que sirve para detectar a conductores que han consumido estupefacientes. La puesta en marcha de esta nueva herramienta ya ha arrojado los primeros resultados, tras detectar que seis personas se pusieron al volante tras haber consumido estupefacientes y otras dos circulaban ebrias.

Según fuentes municipales, los agentes han realizado el curso homologado por el Instituto Valenciano de Seguridad Pública sobre el uso del «drogotest», una herramienta destinada a la detección de cualquier tipo de sustancia estupefaciente que potencialmente haya podido tomar o ingerir un usuario.

«Este tipo de control se hace cada vez más necesario al detectar que muchas veces la perdida de facultades de los conductores no tiene que ver con el alcohol, sino con el consumo de drogas», destacaron desde el Ayuntamiento.

Teórico-práctico

Los agentes y oficiales que asistieron al curso teórico-práctico, tanto de la policía de Callosa de Segura como de Almoradí, recibieron formación por parte de agentes ya especializados, de una psicóloga, así como del fiscal delegado provincial de Seguridad Vial, José Antonio Artieda.

El curso se completó con la aplicación práctica de conocimientos mediante la puesta en marcha de controles en diferentes puntos que seguirán realizándose desde ahora.