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La recogida y eliminación de basura de Rojales costará al menos 617.620 euros al año

El Pader vota en contra de la propuesta y denuncia que la anterior adjudicataria «ha inflado» el número de trabajadores que tendrán que ser subrogados

La recogida y eliminación de basura de Rojales costará al menos 617.620 euros al año

Cinco meses después de que venciera el contrato del servicio de basuras en Rojales, el equipo de gobierno socialista, liderado por Antonio Pérez, ha llevado a pleno la aprobación del pliego que regirá la nueva adjudicación. El trámite salió adelante con los votos a favor del PSOE, la abstención del PP y en contra del Pader. Las bases prevén que el importe máximo que se pagará por este servicio será de 617.620 euros anuales, con un máximo de seis años.

La oposición del Pader justificó ayer su voto en contra al considerar que el número de trabajadores estimado para prestar el servicio se ha inflado y no es real. El portavoz de este grupo, Desiderio Aráez, dijo que la actual adjudicataria, Sirem, envió una lista con el personal que supuestamente está trabajando en estos momentos en el servicio, que es «irreal a todas luces». Y ese personal -13 operarios que cuestan 21.000 euros mensuales- es el que se tendrá que asumir cuando se realice la nueva adjudicación, puesto que se subrogará. «No es que lo digamos nosotros, es que lo dijo el redactor de los pliegos y lo argumentó técnicamente. De esta manera el contrato es perjudicial para los intereses de Rojales, ya que nace con un gasto excesivo en personal que afecta al precio de licitación», valoró el edil.

Aráez explicó que, según la empresa, en cada camión de recogida de basura hay un conductor y dos peones, mientras que se dice que existe otro vehículo con un conductor y un peón a jornada completa para recoger diariamente todos los enseres y lavar los contenedores. Y eso es algo que, según el concejal, «todos los vecinos saben que no es así». El portavoz del Pader aseguró que aunque la secretaria del Ayuntamiento requirió en varias ocasiones a la mercantil que enviara una lista real, nunca llegó.

La solución que el Pader propuso para no gravar de más a las arcas municipales era que esos trabajadores que «no trabajan en la basura» pasen al servicio de limpieza viaria. ¿Cómo? Licitando ambos servicios en una misma contrata. Según Aráez, esa era una forma de acabar también con el «déficit» de limpieza viaria. De un lado dijo que el contrato existente para limpiar las urbanizaciones se adjudicó en 2006 y desde entonces se han ampliado un 50% las zonas de actuación, por lo que no hay personal suficiente. De otro, que la limpieza del casco urbano, que la asume el Ayuntamiento, tampoco se hace como debería y se refuerza pagando a la empresa que limpia las urbanizaciones.

El gobierno municipal hizo caso omiso a estas propuestas y en el mismo pleno que aprobó el pliego de las basuras acordó prorrogar el contrato de limpieza de urbanizaciones. Ello a pesar de que en 2014 se elaboró un pliego para licitar de forma conjunta el servicio de limpieza en las urbanizaciones y en el casco urbano. Pliego que, por el momento, seguirá en un cajón.

Este diario trató de contactar ayer con el alcalde rojalero para conocer su versión, sin conseguirlo.

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