Aseguran que sus hijos no acudirán a clase hasta que la Conselleria de Educación disponga un profesor más. Los escolares de tercero de Primaria del colegio Antonio Sequeros de Benejúzar iniciaron ayer una huelga indefinida para protestar porque, según la agrupación de padres y madres, se quiere concentrara 60 estudiantes en dos aulas en vez de ser repartidos en tres clases, como hasta ahora, y eso es algo que consideran excesivo.

Los menores y sus progenitores acudieron ayer al centro educativo pero se quedaron en el patio. Después se marcharon a casa. Eso es lo que pretenden seguir haciendo mientras Educación no disponga un docente más, lo que ayudaría a reducir la ratio. Los padres creen que con clases de 30 personas y empezando un nuevo ciclo los niños podrían sufrir «problemas de adaptación». Dicen además que el centro «no cuenta con aulas que posean infraestructuras y dotaciones adecuadas para ese número de alumnos y no se cumple con una superficie mínima por alumno, impidiendo la aplicación de nuevas formas de enseñanza y, en consecuencia, mermando la calidad de la misma». Creen igualmente que los niños con necesidades educativas especiales «no van a disponer de la atención de calidad que necesitan» y ponen en duda que cuando se organicen actividades fuera del aula, como excursiones, se pueda hacer un control exhaustivo de los menores al disponer de un docente menos que el pasado año.

Inspección

Los progenitores dicen haber contactado con la Dirección Territorial de Educación y con la Inspección educativa pero, como no les han ofrecido soluciones, mantendrán por ahora su huelga indefinida como protesta, por lo que los niños no empezarán el curso.