Unos por otros y la casa sin barrer, o sin reformar, mejor dicho. Este refrán describe lo que está ocurriendo en el colegio Virgen de la Puerta de Orihuela, cuyo estado de conservación deja mucho que desear. Al finalizar el curso 2016/2017, la edil de Educación, Begoña Cuartero, anunció inminentes reformas para arreglar los múltiples desperfectos que tiene el centro escolar y adelantó que la Conselleria de Educación llevaría a cabo las suyas, todo antes de septiembre. Sin embargo, a sólo unos días de iniciarse el nuevo curso nada se ha hecho y los 250 alumnos que estudian en este colegio volverán a encontrarse con goteras en las aulas, desconchones en las paredes y grietas en las pistas deportivas, entre otros desperfectos.

Cuartero culpó ayer del retraso a la Conselleria de Educación al no haber iniciado los trabajos a los que se comprometió y que consisten en la retirada de unas vigas de los aleros que afectan a la fachada del edificio que ubica la cocina y al comedor y que da al patio central del colegio. La edil aseguró que «mientras Conselleria no realice estas obras, la Concejalía no puede restaurar el pavimento de las pistas ni pintar la fachada» e instó a la administración autonómica a realizar las actuaciones pendientes «para garantizar la seguridad de los escolares».

Sus palabras no tardaron en ser contestadas por la Conselleria de Educación, a través del secretario de organización de Compromís en Orihuela, Martin Borislavov, quien se puso ayer en contacto con el área que dirige Vicent Marzà (Compromís). «La concejala tira balones fuera, miente y trata de crear de nuevo enfrentamientos sin sentido con el Consell ya que desde Conselleria nadie se ha comprometido a acabar las obras en agosto, sino a redactar la memoria valorada que estará acabada la semana que viene». Tras la realización de esa memoria se deberán licitar las obras cuyo proceso no durará menos de 4 meses. «Nadie se ha comprometido a hacer las obras este verano porque los términos administrativos son imposibles de cumplir en este tiempo», explicó Borislavov.

Desde la Generalitat insisten en que las obras que tiene que hacer la Conselleria y las que debe realizar el Ayuntamiento no están relacionadas de forma obligatoria, por lo que el gobierno local podría hacer su parte sin problemas. Además, muchos de los desperfectos están en el interior, donde el Consistorio podría haber actuado ya.

El presidente del Ampa del CEIP Virgen de la Puerta, José Andrés Berná, criticó «las excusas patateras» de la edil de Educación a quien instó a «actuar de manera inmediata en el centro porque es un peligro y pueden hacerlo sin esperar a la Conselleria porque hay más de 200 metros donde actuar, además de las aulas». Berná explicó a este diario los problemas que sufren los escolares y aquellos que han estado acudiendo por la mañana este verano a clases extraescolares. «En los baños se caen los azulejos, las puertas no tienen pomo y otras están atascadas, se ha venido abajo alguna cornisa de las ventanas y las persianas no siempre suben». Además de las goteras que con lluvias como las de ayer acrecentan el problema. Y lo peor, denuncia, está en patio y en las instalaciones deportivas, con numerosas grietas, canastas y porterías rotas, alambrado deficiente, árboles que levantan el asfalto y hasta hundimientos en las pistas, que el Ayuntamiento ha tapiado. «Sólo ponen parches», denuncia Berná.

Inversión

La edil de Educación, Begoña Cuartero explicó, por otro lado, que está pendiente de actuaciones en el CEIP Los Dolses y en Nuestra Señora de Monserrate, en Molins. En el primero, la Conselleria debe levantar un muro medianero «que llevamos reclamando desde hace tiempo y del que estamos esperando la fecha de inicio de estos trabajos». En cuanto al colegio de Molins dijo que está pendiente la sustitución de toda la instalación eléctrica». Su concejalía ha invertido 50.000 euros este verano en trabajos de pintado de paredes, puertas, barandillas, colocación de azulejos, pavimentos, arreglo de goteras, fontanería, iluminación y cerraduras, entre otras actuaciones, para dejar listos los centros escolares que volverán a la actividad el 11 de septiembre.